El portero del Real Madrid Iker Casillas aseguró este miércoles que será un "reto personal bonito" ser el primer capitán del equipo tras la marcha de Raúl y de Guti, unas ausencias que han dejado en el jugador una sensación de "nostalgia y pena".

El veterano futbolista merengue se ejercitó por primera vez con sus compañeros después de regresar de sus vacaciones y fue recibido por un vestuario con varias caras nuevas y liderado por el portugués José Mourinho. "Ha habido cambios", dijo Casillas que confesó sentirse "extraño" al no encontrarse a Raúl y Guti en la concentración.

"Han sido muchísimos años, muchísimas vivencias pero es ley de vida. Nos hacemos mayores y el tiempo pasa para todos. Desde la marcha de Michel Salgado, la salida de Raúl y Guti, te da cierta nostalgia y cierta pena", admitió el jugador, quien mira ahora a la era Mourinho con optimismo.

"He estado hablando con él largo y tendido. Tiene mucha ilusión para hacer las cosas bien. Tiene un grupo joven y con muchas fuerzas", explicó Casillas para quien el Madrid puede "aspirar a todo" aunque primero tendrá que "hacer un encaje con los jugadores que han llegado".