«Nuestra apuesta es por el transporte público, pero hay gente que no lo utiliza y entonces la moto es un buen sustitutivo», explica Javier Conde, director general de Movilidad del Ayuntamiento. Con esta medida, según Conde, se descongestionará el tráfico y se evitarán los frecuentes zigzags de los motoristas entre los coches. «Tampoco esperamos un uso masivo del carril-bus, pero será una buena opción, sobre todo por las noches», añade Conde.

120.000 matriculadas

José María Herrero, portavoz del Motor Club Europa, cree que la iniciativa «favorece la movilidad» y no perjudica ni a autobuses ni a coches. «Esta medida es bienvenida», dice. En la capital hay matriculadas 120.000 motos y ciclomotores. En 2006 también se señalizarán 300 aparcamientos con 1.500 plazas en total.

El modelo mediterráneo

El uso de las motos está asociado a las ciudades mediterráneas. Y el Ayuntamiento quiere seguir ese ejemplo, según explica el director general de Movilidad, Javier Conde. En capitales como Barcelona y Roma, por ejemplo, abundan los vehículos de dos ruedas y su uso es masivo. En la Ciudad Condal se pretendía facilitar el uso del carril-bus para las motos, pero esta medida no se ha puesto en marcha. Sin embargo, hay un cierto uso «permisivo» y pocas veces se imponen multas, tal y como cuenta un motorista.

Jesús Reyes. Mensajero. 41 años. «Ser motorista en Madrid es muy duro y  peligroso. Yo llevo cuatro años como mensajero y sé que siempre hay que estar muy atento, sobre todo cuando llueve. Me parece bien la medida del Ayuntamiento».

Daniel Fernández. Motorista. 30 años. «Utilizo la moto desde hace cinco años. A veces, circulas bien y, a veces, mal. Me parece bien utilizar el carril-bus. De hecho, creo que deberían hacer uno especial para nosotros. Todos deberían usar la moto».

José Ignacio López. Trabaja en prensa. 34 años. «Llevo moto desde los 14 años y debo decir que la circulación es estresante, sobre todo en la M-30, que ahora es como un campo de cross. Creo que utilizando el carril-bus se podrá circular mejor».