La Unión Sindical de Controladores Aéreos (USCA) niega que las bajas de personal que se están produciendo en los centros de trabajo se deban a consignas sindicales que persigan presionar las negociaciones del II Convenio Colectivo y oculten una huelga encubierta del sector.

Este lunes, en el turno de mañana, 18 de los 53 controladores aéreos del Centro de Control de Tráfico Aéreo de Gavà (Barcelona) no han acudido a su puesto alegando baja médica. De hecho, la mitad de ellos han avisado esta misma mañana, lo que ha obligado a cerrar cuatro de los 11 sectores que operan en el aeropuerto.

Debido a ello, ha habido retrasos en una quincena de vuelos en el Prat, según informa RNE. Además, el aeropuerto de Valencia cuenta este lunes con dos bajas y en el aeropuerto alicantino de El Altet, ocho vuelos han registrado retrasos de 41 minutos de media. De momento, en Barajas, se han registrado algunos retrasos, de entre 20 minutos y una hora, en vuelos procedentes de Barcelona, Alicante y Palma de Mallorca.

En el turno de tarde, de 53 controladores, han faltado 21. Sumados a los 18 de esta mañana, ha faltado el 36,7% de la plantilla prevista para este lunes en el centro de control.  Además, Aena ha señalado que 16 de las 39 bajas se han comunicado esta mañana, lo que ha dificultado la organización de relevos para cubrir a los controladores que no han acudido al trabajo.

El retraso medio de los vuelos es de 29 minutos, aunque algunos superan la hora y media de demora. De los 900 vuelos programados, entre llegadas y salidas, se han cancelado una docena.

El Centro de Gavà no sólo da servicio al espacio aéreo de Catalunya, sino que controla las áreas de Barcelona, Girona y Reus, además de Valencia, la mayoría de vuelos de Baleares y otros como Alicante y Murcia. Este fin de semana, 28 controladores del aeropuerto de El Prat, un 46% de los que tenían servicio, no asistieron a su puesto de trabajo.

"Si fuera una huelga habría expedientes abiertos", han señalado fuentes del colectivo, tras rechazar la idea de que los controladores estén preocupados por la intención del ministro de Fomento, José Blanco, de trasladar a la Fiscalía las demoras en los aeropuertos porque "no tienen nada que ocultar".

Las fuentes han explicado que éste es un procedimiento normal que se viene haciendo desde hace meses y que ha demostrado que todas las bajas de personal son "veraces" porque hay gente "muy fastidiada" que se ha visto obligada a trabajar más horas y que cuenta con menos tiempo de descanso.

De hecho, han pedido que las investigaciones se realicen "hasta el final" y que, una vez que se compruebe que las bajas son verdaderas, se analicen las causas que provocan esta situación entre los controladores. "A la gente le acaba por minar (...) es como si han futbolista le hacen jugar cuatro partidos a la semana", han subrayado.

El portavoz de USCA, Daniel Zamit, ha segurado que "no es casual" que cinco meses después del Real Decreto se haya producido un incremento de las bajas, ya que se han reducido los descansos al 25% de la jornada, se trabajan más horas efectivas y entra menos gente en servicio pasando "más aviones por sus manos". "Esto va quebrantando la salud de la gente", ha lamentado.

Zamit ha precisado que existen bajas por enfermedades comunes y también por causas como insomnio por estrés, fatiga, tres cirugías, un traumatismo cervical y permisos por paternidad y maternidad, y ha recordó que el gestor aeroportuario publicó el turnero el pasado 20 de junio y que éste incluía a personal de bajas de larga duración. "Eso es una mala gestión", ha destacado.

Los controladores han asegurado "no entender" la alarma social que se ha creado este fin de semana, ya que simplemente se está registrando una operación salida "complicada", al tiempo que han resaltado que España está teniendo menos problemas que otros países europeos.