El Defensor del Pueblo Andaluz, José Chamizo, afirmó hoy que el uso del burka en un espacio público "no tiene sentido", y, además, es "negativo" para las mujeres, aunque incidió en que hay que tener cautela a la hora de plantear su prohibición porque "se corre el riesgo de caer en la islamofobia que ya existe en muchos lugares".

Según indicó Chamizo a Europa Press, aunque existe la libertad de que cada persona vista como desee, en los espacios públicos "hay que ir con la cara descubierta", ya sea en el hospital o para solicitar una vivienda, por ejemplo, por lo que la utilización del burka "no tiene mucho sentido".

También consideró "negativo" para las mujeres su uso, aunque resaltó que "no hay que confundir el 'hijab' o pañuelo que utilizan muchas mujeres y deja el rostro al descubierto con el burka, que procede de Afganistán y que no se utiliza en todo el mundo árabe". En Andalucía, concretamente, reconoció que su uso "no está ni mucho menos extendido".

"Es más, en países como Egipto, el protector de la Universidad al- Azhar, la más importante que existe sobre Derecho Islámico, conocido como 'el gran sabio' prohibió en uso del burka en la universidad", afirmó.

No obstante, reconoció que en el debate sobre la regulación del uso del burka existen "muchas contradicciones", ya que, tal y como recordó, el Consejo de Europa, en su última asamblea, "vetó la utilización del burka por miedo a que la mujer que lo usa se recluyera en casa".

Además, subrayó que "prohibir por prohibir tampoco es lícito" y dijo que "antes es necesario convencer a las mujeres que se lo ponen de que es una prenda que no tiene mucho sentido".

Chamizo defendió que su regulación es un asunto que debe de tratar el Estado y no dejar la decisión en manos de los ayuntamientos, ya que, dijo, "puede generar muchos problemas". Además, recordó que ya el Gobierno central aborda este tema en la Ley de Libertad Religiosa en la que está trabajando.