La estela de Estela Films

Así es la productora de ‘Los del túnel’, la más antigua de España todavía en activo
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Félix Tusell no sabe por qué su productora se llama Estela Films. Su padre, de quien la heredó, murió cuando él tenía ocho meses, y su abuelo, el fundador, al poco de que cumpliese ocho años. Verdaderamente, hay muchas cosas que Félix Tusell desconoce de su empresa, la productora más antigua de España y con una nueva película en la cartelera este mes: Los del túnel, comedia dirigida por Montero y Maidagán y con un reparto de lujo que incluye a Arturo Valls, Raúl Cimas, Natalia de Molina, Manolo Solo o Teresa Gimpera, se estrena el 20 de enero.

“Hay muchas cosas que no sé”, reconoce Félix Tusell en la nueva sede de Estela Films, un piso en la madrileña calle de los Estudios en el que abundan la luz y las ventanas. El productor más joven de España (tiene 26 años cuando hacemos esta entrevista) luce patillas de torero, quevedos de concha y traje a medida con pañuelo en el bolsillo. “Parece un productor del Hollywood clásico. Inteligente, elegante y de buenos modales”, clava su descripción Arturo Valls, protagonista y coproductor con Félix Tusell de Los del túnel junto a Carmela M. Oliart, directora de producción en Estela Films, socia, amiga y “hermana” desde que sus padres, dada su orfandad, prácticamente adoptaron a Félix. Ellos son desde hace seis años la nueva Estela Films, con permiso del canario José Alfredo, que canta escondido en algún rincón de la productora mientras hablamos. Su unión profesional era cuestión de tiempo dada la relación fraternal y la herencia cinéfila y se convirtió en una realidad cuando ambos orientaron sus estudios a la producción: Carmela en la ECAM y Félix en la Carlos III. De fondo, detrás de la mesa en la que tiene lugar este encuentro, una pared hace las veces de museo de Estela Films.

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Fue en el año 2010, en lo peor de la crisis, cuando Carmela M. Oliart y Félix Tusell volvieron a poner en marcha Estela Films. “Éramos muy jóvenes y temerarios”, se ríe ella. En 2014 llegó el primer proyecto de esta nueva andadura de la productora, Epitafios, corto de María Ballesteros que financiaron a través de una campaña de crowdfunding y en el que conocieron a Arturo Valls y surgió el germen de Los del túnel. “Teníamos en común que queríamos hacer el mismo tipo de película –recuerda el actor de Camera Café–. ¿Un inconsciente como yo y unos espíritu tan juveniles? Tenía que funcionar”. “Porque antes yo creo que no había esta separación entre el cine de autor y el comercial. Las películas de Berlanga eran comerciales. Arturo y yo, de hecho, lo hemos visto siempre así. Estábamos hartos de que Magical Girl la viesen cuatro gatos hipercinéfilos y Ocho apellidos vascos se vea de forma masiva”, coincide Félix Tusell.

[caption id="attachment_74200" align="alignnone" width="500"]Jordi Tusell recogiendo el Oso de Oro por 'Amanecer en puerta oscura' Jordi Tusell recogiendo el Oso de Oro por 'Amanecer en puerta oscura'[/caption]

Ese cruce entre comedia accesible para todos los públicos y humor elaborado no es la única seña de identidad de Los del túnel. La comedia sobre cómo un grupo de supervivientes gestionan el estrés postraumático que el derrumbamiento de un túnel les ha causado tiene cierto sabor a las comedias corales de Azcona y Berlanga, a las ocurrencias de Fernando Fernán Gómez o a los versos entonados por Los Pecos. Una conexión con nuestro legado cinéfilo y musical que, en gran medida, se debe a la elección de Pepón Montero y Juan Maidagán para la escritura y realización del proyecto, un dúo vintage hasta en la elección de su firma artística. No es casual, por tanto, que la productora que ha hecho posible Los del túnel sea una con la historia de Estela Films. “Siempre hemos fantaseado mucho con tiempos pasados, siempre nos hemos sentido un poco fuera de nuestra generación”, coincide Carmela.

“En la oficina, lo mismo estoy atendiendo algún asunto de nuestros últimos cortos que restaurando el trabajo de mi abuelo –explica Félix–. Es una cosa muy bonita. Probablemente, yo le dedique toda mi vida y mis nietos todavía estén gestionando Los del túnel dentro de unos años. Es muy impresionante”. Estela Films fue fundada el 12 de febrero de 1948, registrándose en el Ministerio de Cultura con el número 23. El abogado barcelonés Jordi Tusell Coll (Medalla de Oro de la Academia en 1996), abuelo de Félix, recibió el encargo de su cuñado Félix Millet de sacarla adelante. “Se habían endeudado produciendo Érase una vez y le dijeron a mi abuelo que si conseguía llevarla a buen puerto podía quedársela”, recuerda su nieto sobre los inicios de su empresa, cuando la familia Tusell se embarcó en la realización de una de las primeras películas de animación de la historia del cine español. Dirigida por Alejandro Cirici-Pellicer con guión de Escobar basado en el cuento de Charles Perrault La Cenicienta, la película tuvo la mala suerte de coincidir en el tiempo con Disney, que inmortalizó dicho título poco meses antes que Estela Films. “Érase una vez estaba hecha en fotocolor, un formato que se creó ex profeso para la película y que pensaban que iba a competir con el tecnicolor. Ese material desapareció después y yo sólo se conserva un 16 mm en blanco y negro y 140 frames originales con el color original”, explica Félix sobre una de las primeras películas que produjo Estela Films y que actualmente restaura Luciano Berriatua en colaboración con la Filmoteca de Catalunya.

Parte del trabajo de Félix Tusell consiste en cuidar el catálogo de su longeva productora, un catálogo que, cuando llegó a sus manos, estaba en un estado bastante problemático. “Había que inventariarlo, estaba en diferentes laboratorios, en unas condiciones nefastas… Muchos de los materiales de las películas son tan antiguos que había que restaurarlos porque estaban muy degradados. Había que hacer un enorme trabajo de restauración, inventariado y divulgación”, recuerda Félix, contento por la explotación que se está haciendo de su catálogo en plataformas como el programa de La 2 Historia de nuestro cine. “La vida por delante, por ejemplo, era una película con síndrome del vinagre, que es una enfermedad que tienen los materiales que son tan sensibles como los negativos. Se estaba echando a perder y es una película excepcional que se recuperó hace poco en el programa”.

Aquella genialidad de Fernando Fernán Gómez no es la única joya que descansa en el catálogo de Estela Films. La productora cuenta con un Oso de Plata berlinés por Amanecer en Puerta Oscura (1957), de José María Forqué y protagonizada por Paco Rabal, y con un Goya por ¡Ay Carmela! al mejor vestuario diseñado por Mercedes Sánchez Rau, la madre de Félix Tusell. Los peces rojos, el prestigioso thriller dirigido por José Antonio Nieves Conde es otra de las películas producidas por el primer dueño de Estela Films. “En la época de mi abuelo se hicieron muchas coproducciones, los spaghetti western, por ejemplo, que tenemos unos cuantos”, explica Félix refiriéndose a títulos como Adiós, Texas o 7 pistolas para los MacGregor, con banda sonora de Ennio Morricone. También en los 60 produjeron Teresa de Jesús, –dirigida por Juan de Orduña, escrita por Manuel Mur Oti y protagonizada por Aurora Bautista–, Los Palomos (Fernando Fernán Gómez, 1964) o Café de Chinitas (Gonzalo Delgrás, 1960).

[caption id="attachment_74212" align="alignnone" width="477"]1961 Aurora Batista en 'Teresa de Jesús'.[/caption]

“Y en el 70 entró mi padre, un poco con la voluntad de hacer proyectos que le enriqueciesen a él culturalmente y financiarlos con otros más comerciales. Mi padre sí que era un cinéfilo absoluto, que se movía por pasión. Hacía películas del destape [Es pecado… pero me gusta, La venus negra…], pero con la vista puesta en el cine de autor”. De autores como Berlanga (Moros y Cristianos), Mario Camus (La vieja música), Jordi Grau (Una historia de amor) o Jaime Camino (Un invierno en Mallorca). “Un año antes de morir en un accidente de coche, mi padre estaba terminando La forja de un rebelde (Mario Camus, 1990), una superproducción de época ambientada en Marruecos. Yo siempre me lamento de que muriera tan pronto porque probablemente la productora hubiese seguido produciendo películas excepcionales”, cuenta Félix Tusell de la filmografía inacabada de su padre que es su mejor legado. “Para mí tiene un punto romántico, es mi herencia de mi abuelo y de mi padre. Y más allá de lo romántico, hay algo emocional. Mi padre murió cuando yo tenía ocho meses y mi abuelo murió cuando yo tenía ocho años pero con una enfermedad degenerativa y no pude conocerle bien. Y me está pasando que los estoy conociendo a través del trabajo, que es una cosa muy bonita”.

[caption id="attachment_74202" align="alignnone" width="474"]Unknown-3 Estela Films en los 70.[/caption]

Su labor al frente de Estela Films, a la par que produce nuevas películas con su socia Carmela M. Oliart, tiene mucho de reconstrucción de su propio pasado. Empezando con Los del túnel una de las actrices es Teresa Gimpere, con la que trabajaron tanto su abuelo como su padre. “Cuando algo así sucede me vuelco lógicamente en preguntarles por ellos, cómo eran, y así me voy formando mi propio retrato”, explica Félix Tusell sobre este collage de sus historia familiar que va montando mientras construye el presente y el futuro de Estela Films. “Hace poco, en una de las mudanzas de oficina, tuve que hacer limpieza de archivo. Claro, antiguamente, no existía el histórico de e-mails, todas las cartas se archivaban. Por no tirar indiscriminadamente, porque se podía ir algún archivo importante, me hice una lectura pormenorizada de todas las cartas, y al leer la correspondencia de mi padre me reconocía totalmente en ella”. No es la única reconstrucción del pasado de Estela Films que está haciendo la familia Tusell. Uno de los proyectos que están produciendo, además de la ópera prima de María Ballesteros y un nuevo proyecto del que todavía no pueden hablar, es el documental Tiempo de vida, dirigido por Emma Tusell, en el que la hermana de Félix y montadora de Magical Girl, se acerca a la figura desconocida de su padre a través de las cintas de vídeo que él grababa en sus viajes familiares.

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“Es difícil esta lucha contra la desmemoria. Realmente me encuentro con un enorme vacío de información”, comenta Félix Tusell. Por ejemplo, el del nombre de su productora, cuyo sentido, dice, “siempre será una intriga”. Y sin embargo, el nombre no le puede caer mejor. Como la estela que va dejando un barco según navega, el pasado de este productor de 26 años le acompaña siempre, dejando en cada película que produce el rastro de su pasado.

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