El presidente de la Generalitat, José Montilla, inauguró hoy la nueva sede de la Generalitat en Girona, ubicada en el renovado edificio del antiguo Hospital Santa Caterina. El nuevo equipamiento, de más de 30.000 metros cuadrados, acoge la gran mayoría de los servicios territoriales de la demarcación, lo que permitirá un ahorro en alquileres de 1,3 millones de euros.

"Este ahorro facilitará una gestión más racional de los recursos y del tiempo", apuntó en su discurso de inauguración el presidente. Asimismo, se refirió al "sacrificio" que tendrán que hacer los trabajadores públicos a causa del recorte de las retribuciones: "Estoy convencido que sabrán afrontar el esfuerzo", manifestó.

Montilla también recordó que hace ya 78 años, en tiempos de la República, el que fue presidente de la Generalitat en el exilio, Josep Irla, ya hablaba de acercar la Generalitat al territorio, "una intención que todavía se mantiene" y que hoy es más cercana.

El presidente estuvo acompañado por el delegado del Govern en Girona, Jordi Martinoy; el vicepresidente de la Generalitat, Josep Lluís Carod Rovira, y la alcaldesa de Girona, Anna Pagans.

Además les acompañaron los directores de los servicios territoriales de la Generalitat; la consellera de Salut, Marina Geli; el conseller de Política Territorial y Obras Públicas, Joaquim Nadal; el subdelegado del Gobierno en Girona, Francesc Francisco Busquets, y el Obispo de la ciudad, Francesc Pardo, entre otras personalidades.

Martinoy mostró su satisfacción por el nuevo edificio y recordó que "las piedras tienen mucha historia" -en referencia al antiguo hospital—. También agradeció la paciencia a todos los empleados de la casa.

Por su parte, Pagans recordó que desde el Ayuntamiento de Girona siempre se ha trabajado "por rehacer los edificios patrimoniales", y que actualmente se está promoviendo un modelo de ciudad con el que se quiere "dar un buen servicio público".

Modelo para otras demarcaciones

Carod Rovira aseguró que el modelo de administración que hoy se inauguró en Girona se extenderá al resto de demarcaciones, empezando por Tortosa y Lleida. Unir todos los servicios en un solo edificio supone "más ahorro, más eficiencia, mejores servicios, equilibrio territorial y una optimización de los recursos", apuntó.

El vicepresidente también apuntó que en época de crisis no solamente hay que recortar gastos, "sino que los que se lleven a cabo sean los necesarios". Por ello recordó que con la nueva Generalitat de Girona se ahorrarán 1,3 millones de euros al año.

La puesta en funcionamiento de la nueva sede ha supuesto el traslado de 850 personas de los diferentes servicios territoriales. El nuevo edificio también cuenta con la Oficina de Atención al Ciudadano, donde se pueden realizar hasta 625 trámites diferentes y que sustituye a las 29 oficinas especializadas que antes funcionaban en toda la ciudad.