El hombre acusado de matar a otro el 27 de octubre de 2007 en un domicilio de la calle Garrigues de Valencia y envolverlo en plásticos aceptó hoy ante un jurado popular, en la Audiencia de Valencia, cumplir una pena de 12 años de prisión por un delito de homicidio. Por su parte, la mujer detenida por este suceso aceptó cumplir dos años y siete meses por un delito de encubrimiento.

La pareja, L.N.B, de 54 años, y J.M.L.H., de 22, son ciudadanos franceses que fueron detenidos en Suiza tras cometer el crimen. La víctima fue asesinada el 27 de octubre de 2007, aunque su cuerpo, que presentaba 45 heridas de arma blanca y estaba envuelto en plásticos, no fue localizado hasta el día 8 de noviembre. Tras ello, se abrió una investigación por parte de agentes de Interpol, de la UDEV Central y de la Brigada Provincial de la Policía Judicial de Valencia, en colaboración con la Policía Suiza.

El cadáver de este ciudadano español apareció en una de las habitaciones realquiladas de una vivienda de la calle Garrigues de Valencia. Una vez identificado el cuerpo, que presentaba numerosas heridas por arma blanca en cuello, tórax y abdomen, los agentes tomaron declaración a los restantes inquilinos de la vivienda.

De este modo, se averiguó que en una de las habitaciones vivían realquilados dos ciudadanos franceses, un hombre y una mujer, que al parecer habían abandonado el piso de forma precipitada. Además, otro inquilino que pernoctaba en la misma habitación que el fallecido, manifestó que, el 27 de octubre, ambos estuvieron viendo la televisión junto con los ciudadanos franceses. A lo largo de la noche, éste se marchó a dormir y ya no volvió a ver a la víctima.

Las sospechas continuaron apuntando a los franceses, ya que, la inspección ocular realizada por la Policía Científica en su habitación, descubrió que había restos de sangre ocultos por una alfombra que se encontraba debajo de una mesa.

Tras realizar diversas gestiones policiales, los investigadores localizaron a un individuo, que manifestó haber recibido una visita de la mujer, L.N.B, a finales de octubre. Fue entonces cuando le reveló que J.L.M.H había matado a una persona, y tras envolverla en un plástico, le había pedido colaboración para ocultar el cuerpo.

Días después, este hombre recibió una llamada telefónica por parte de la mujer, en la que manifestaba que ambos se encontraban en Suiza. Tras averiguar la localidad y el lugar de trabajo de L.N.B, los agentes españoles se desplazaron al mencionado país, y con la colaboración de la Policía suiza, localizaron y detuvieron a la pareja.