"Demasiadas" mujeres casadas son "egoístas", "no aman" a sus maridos y "sus quejas son tan injustas" que provocan el fin de sus matrimonios. Ésta es la teoría sobre las relaciones de pareja que mantiene la Asociación de Familias Numerosas de Pozuelo en uno de los artículos publicados en su revista, que se edita gracias a una subvención del Ayuntamiento.

Textualmente, en el artículo se lee: "Demasiadas uniones se transforman en desuniones por culpa de las mujeres, las cuales no tienen hacia el marido ese amor que es todo: amabilidad, compasión y consuelo. Es tal el egoísmo que a veces la mujer le añade al marido cansado, desilusionado, abrumado, preocupado, el peso de inútiles quejas, e incluso a veces injustas. Y todo porque es egoísta; no ama".

15.500 euros y un local

Durante 2009, esta asociación recibió una subvención municipal de 9.500 euros y en 2010 la ayuda ha sido de 6.000 euros. Además, la entidad utiliza un local cedido por la Concejalía de Familia. Por su parte, la Comunidad también concede una subvención a la asociación, según denunció la portavoz socialista en Pozuelo, Eva Izquierdo.

"Es bastante grave financiar con dinero público este tipo de publicaciones que atentan contra la Constitución y nos recuerda a la Sección Femenina de la dictadura franquista", añadió Izquierdo.

El Ayuntamiento defendió que "no comparte en absoluto" los planteamientos de la revista y que "no se hace responsable de las declaraciones" de entidades subvencionadas. El consejero de Presidencia, Francisco Granados, añadió que "no todas las asociaciones que reciben fondos tienen idearios coincidentes con los de la Comunidad".

"Barbaridad" y "trato vejatorio"

La revista "machista" de Pozuelo ha estado en el centro de todas las críticas este fin de semana. El líder del PSOE regional, Tomás Gómez, calificó el artículo de "auténtica barbaridad", y a la asociación, de "vergüenza en una sociedad moderna". A la ministra de Igualdad le parece "sorprendente" que se subvencione una revista con contenido "misógino". El PSOE municipal recordó un acto de Provida, avalado por el Ayuntamiento, en el que se afirmó que "la diferencia entre una bofetada a una mujer y una caricia era una cuestión de velocidad".