El Ayuntamiento de Lleida se ha convertido este mediodía en la primera ciudad española en prohibir los velos integrales (burka y niqab) en los equipamientos públicos, como se anunció el miércoles.

Ante una gran expectación mediática, el consistorio leridano ha aprobado sobre las 12.38 horas esta propuesta con 23 votos a favor de CiU, PSC, PP y un concejal independiente, un voto en contra de ICV-EU-EPM y dos abstenciones de ERC.

Los valedores de esta prohibición han argumentado que el burka y el nicab atentan contra la dignidad de la mujer, son discriminatorios y violan el principio de igualdad entre hombres y mujeres recogido a la Constitución Española. ERC, en cambio, ha criticado las "prisas" con que se ha actuado para prohibir el velo integral e ICV considera que la medida es "innecesaria, inoportuna y contraproducente".

La moción, que inicialmente promovió CiU, plantea prohibir las prendas a través de la ordenanza de civismo, además de instar al Estado y a la Generalitat a que regulen los velos integrales en la vía pública, puesto que los ayuntamientos no están capacitados para ello.

En medio del debate, unas declaraciones del regidor de ICV Ramon Camats han encendido la polémica y han provocado que el alcalde de Lleida, Àngel Ros, le haya pedido que "retirara sus palabras, constitutivas de delito". Camats había asegurado que "el hecho de que se aprueben este tipo de medidas (la prohibición del burka) ayuda a crear un clima de opinión que favorece la xenofobia". Además, ha añadido que "estos comportamientos ayudan a hacer la campaña electoral al señor Anglada porque es una manera de hacer lepenismo''.

La presentación de la moción estuvo precedida por un informe jurídico relativo a la regulación municipal que propone limitar el acceso de cualquier persona con velo integral a todas las dependencias del consistorio, como equipamientos municipales, pabellones o guarderías.