El mundo de la cultura pronuncia el nombre de miles de fusilados en el paraje en el que murió García Lorca

El paraje situado entre las localidades granadinas de Víznar y Alfacar, en el que yacen los restos de Federico García Lorca, ha reunido hoy a más de 600 personas en un homenaje a las víctimas de la Guerra Civil en el que se han pronunciado los nombres de las 1.351 personas que en él fueron fusiladas, según la documentación existente.

Enmarcado en el Festival Internacional de Poesía de Granada (FIP), el acto ha congregado a destacados artistas, músicos y representantes del mundo de la cultura, como Pilar Bardem, Juan Diego Botto, Luis García Montero, Almudena Grandes, Derek Walcott, Luis Pastor o Benjamín Prado, que han visitado hoy todos los lugares marcados por los historiadores como posibles enterramientos del autor de 'Yerma'.

Guiados por el historiador Francisco González Arroyo, los actores, escritores y artistas depositaron sobre las seis de la tarde hoy rosas blancas en el Barranco de Víznar, donde permanecen aún enterradas unas 2.100 personas. El investigador granadino explicó que el lugar, rodeado hoy de pinos, fue el último de los emplazamientos elegidos por los sublevados para enterrar a sus víctimas durante la Guerra Civil en el paraje, después de que Alfacar quedara "saturado".

Los fusilamientos comenzaron en este enclave, según González Arroyo, alrededor del 20 de agosto de 1936, una vez que las tropas de Francisco Franco descubrieran que se trataba de una zona de pozos que les hacía más fácil enterrar a los muertos, simplemente desplazando la maleza que en ella crecía. En Alfacar, los últimos asesinatos se registraron sobre el 16 de agosto, por lo que la "lógica de la cronología" le lleva a pensar a este historiador que Lorca, que fue asesinado el 18 de agosto, fue enterrado en un lugar "intermedio", como lo es el paraje de El Caracolar.

Precisamente allí dirigió González Arroyo a los artistas, señalándoles ocho posibles fosas junto a olivos y al camino que separa Víznar de Alfacar, un lugar que también fue marcado por el historiador Eduardo Molina Fajardo . "En una de ellas es donde podría estar García Lorca, pero eso no lo sabremos hasta que no se produzca una exhumación, por muchas teorías documentadas que se tengan", explicó González Arroyo, que criticó a la Asociación Granadina de la Memoria Histórica -que antes presidía— y a la Junta de Andalucía por elegir el parque para excavar la fosa en la que yace el poeta, excavación que concluyó sin el hallazgo de restos óseos ni evidencia de fosa alguna.

A pie, la comitiva se dirigió finalmente al Parque Federico García Lorca, donde el poeta José Manuel Caballero Bonald comenzó el acto oficialmente con la lectura del poema 'He andado tantos caminos', de Antonio Machado, "otra víctima más de la Guerra Civil muerto en el exilio". Luis García Montero leyó 'Casida de las palomas oscuras' de García Lorca, el poeta "que da sentido a este paraje".

A continuación, el poeta Derek Walcott, que se encuentra en Granada para participar en el FIP, dijo, antes de comenzar a leer los nombres de los ejecutados, que es un "honor", "probablemente el más grande que haya tenido nunca", abrir este homenaje en la ciudad de Lorca que "seguro que no se hubiera considerado más grande" que ninguno de los nombres de la lista leída hoy, sostuvo el escritor de Santa Lucía.

Pilar Bardem pronunció otra decena de nombres, y así hasta 35 personas del arte y la cultura, como José Manuel Cervino, Lucía Álvarez, Olga Rodríguez, Paca Gabaldón, Juan Vida, Rodolfo Dada o los directores del FIP, Fernando Valverde y Daniel Rodríguez Moya y Juan Diego Botto cerró la lista de los fusilados. Para el actor, que dijo estar "sobrecogido" por la visita al lugar en el que permanecen enterradas miles de víctimas, consideró un "deber ciudadano" intentar "reparar" a aquellas personas que sufrieron las consecuencias de la guerra, "y cuanto antes mejor".

Al acto también asistió el presidente de la Asociación para la Recuperación de la Memoria Histórica, Emilio Silva, que quiso recordar precisamente en el Barranco de Víznar a la figura del juez Baltasar Garzón, considerando "difícil de entender" que la "única personas" que ha iniciado una investigación para indagar sobre los crímenes del franquismo pueda ser tratado "como si hubiera cometido un delito".

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