El secuestro de la alemana Susanne Osthoff supone  la primera crisis a la que se enfrenta la nueva canciller alemana, Angela Merkel, que ha prometido mejorar los lazos con Estados Unidos, deteriorados por un fuerte desacuerdo sobre la invasión de Irak.

Merkel dijo en una rueda de prensa que el Ministerio de Relaciones Exteriores ha creado un comité de crisis para lidiar con la amenaza, el primer caso de un alemán secuestrado en Irak.

La canciller había dicho antes que Berlín continuará con la política del gobierno anterior de ayudar a entrenar a las fuerzas iraquíes fuera de ese país y descartó enviar tropas a Irak.

Amenazada de muerte

La amenaza de matar a la mujer alemana, de 43 años, y su conductor se efectuó a través de una grabación de vídeo entregada al canal ARD en Bagdad. Extractos de la grabación colocados en un sitio de Internet de ARD muestran a dos personas sentadas en el suelo con los ojos vendados, rodeadas por tres hombres enmascarados armados. Uno de ellos parecía leer la declaración de un papel.

Medios de comunicación alemanes identificaron a la rehén alemana como Susanne Osthoff, una arqueóloga que habla árabe fluidamente y que ha estado viviendo en Irak durante años realizando tares de ayuda humanitaria. No se difundió la identidad del chófer.

La demanda de que Berlín ponga fin a su apoyo al gobierno iraquí fue rechazada por Hans-Ulrich Klose, un miembro del Parlamento por el partido socialdemócrata. 'Debe quedar claro (a los secuestradores) que estas demandas son inaceptables', dijo Klose a la radio Alemana.

Cuatro cooperantes, también secuestrados

El mismo día en el que se ha difundido el vídeo de la rehén alemana, una organización denominada "Brigadas de las Espadas de la Ley", hasta ahora desconocida, ha asumido la autoría del secuestro de cuatro trabajadores extranjeros de una organización humanitaria en Irak.

Según informó hoy, martes, la cadena qatarí de televisión Al Yazira, los secuestradores enviaron un vídeo en el que asumían la autoría de la captura y en el que se veía a los cuatro hombres y la documentación de uno de ellos, de nombre Norman y nacionalidad británica.

Aunque la televisión no identificó a los secuestrados, desde el pasado fin de semana circulan informaciones de que cuatro trabajadores humanitarios, un británico, un estadounidense y dos canadienses habían sido secuestrados en Irak.