Las tres universidades abren las puertas a una oferta compartida de grados y piden a la Xunta un "esfuerzo económico"

La UDC "no" renuncia a la titulación de Medicina y aclara que "hay fórmulas de cooperación" que no suponen crear nuevas infraestructuras
Convenio Entre Las Universidades Y El Parlamento
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PARLAMENTO
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Los rectores de las tres universidades gallegas suscribieron hoy un acuerdo marco de cooperación en materia de docencia, investigación y financiación por el que abren las puertas a una oferta compartida de grados de carácter interuniversitario. Además, reclaman, según recoge el documento, a la Xunta un "esfuerzo económico suficiente" para que no perder oportunidades ni "debilitar" sus capacidades en esos ámbitos.

El rector de la Universidade de Santiago (USC), Senén Barro, subrayó que "la colaboración es creciente" entre las tres instituciones gallegas, por lo que con el acuerdo marco dan "un paso cualitativo y cuantitativo más", por lo que abogó por más colaboración "y menos fragmentación o confrontación".

Al respecto, explicó que se trata de un documento fruto del avance de compromisos en los que llevan trabajando varios meses las tres universidades gallegas y que, en el caso de la USC y de la Universidade de Vigo (UVigo), fueron aprobados por los consejos de gobierno, mientras que el rector de A Coruña, José María Barja, aclaró que, aunque su universidad no lo votó, el contenido "está en las líneas estratégicas del claustro" "Es absolutamente necesario y la única salida en muchos aspectos del Sistema Universitario de Galicia", apostilló.

Sin embargo, preguntado por este acuerdo, que promueve la potenciación de las singularidades de cada universidad y proyectos colectivos apoyados por las tres, supone que la UDC está dispuesta a renunciar a la titulación de Medicina, Barja afirmó que "no". "No estamos renunciando", recalcó, pero puntualizó que "hay formas de cooperación que no tiene porqué ser creando nuevas infraestructuras".

Por su parte, Senén Barro explicó que tras el protocolo reciente de las tres universidades sobre docencia clínica, dijo que se reunió ayer con estudiantes de Medicina para indicarles que "se trata de un documento de bases para un acuerdo", por lo que insistió en que lo que hay actualmente "es una declaración para sentarse de cara a un posible acuerdo". Con todo, dijo que trabajan para que los alumnos "puedan seguir la formación clínica con absoluta normalidad" en los complejos hospitalarios de Santiago, Vigo y A Coruña.

No obstante, destacó que "hay que esperar a que existan nuevos equipos —en la USC y UVigo— para que puedan seguir avanzado" en este aspecto, por lo que insistió en que no ha dado "ningún paso en falso o irreversible", alegando que no actuó para "condicionar el futuro" pero "tampoco" quería permanecer "impasible".

En relación con la docencia clínica, Barro explicó que, tanto en este caso concreto como en lo recogido en el acuerdo marco suscrito hoy, los nuevos equipos que dirigirán las universidades de Vigo y Santiago "tendrán todas las opciones y las puertas abiertas".

"Nosotros sólo animamos a entenderse a las universidades", recalcó y garantizó que ninguna universidad dio "ningún paso que sea irreversible". "No quise que la USC se sintiera hipotecada", concretó y reiteró que los nuevos rectores de Vigo y Santiago "van a tener todas las puertas abiertas porque ninguna se cerró".

Política universitaria integral

El acuerdo marco suscrito hoy considera que el SUG "necesita promover una política universitaria integral que aumente la complementariedad y la cooperación docente e investigadora" y que "dote a las universidades de una financiación adecuada a sus fines". Barro, sobre todo, incidió en las aspectos de docencia e investigación que recoge el acuerdo, destacando la intención de "hacer apuestas conjuntas en los centros singulares de investigación" y en "reafirmar la cooperación en red".

Así, el documento señala que las tres universidades identificarán individual y colectivamente aquellas áreas de especialización de su actividad de I+D+i en las que resulta especialmente competitiva y potencialmente de excelencia. Al respecto, apuntaron que el Campus Vida, de la USC; el Campus Mariño, de Vigo; y el Campus de Edificación y la construcción sostenibles, de la UDC, representan un primer acercamiento a este objetivo.

De este modo, por el acuerdo las universidades expresan su voluntad de reforzarse mutuamente en sus respectivas iniciativas individuales, lo que "de inmediato significará la presentación de candidaturas del SUG en próximas convocatorias de Campus de Excelencia".

Tres niveles

Asimismo, impulsarán tres niveles de colaboración: el de las infraestructuras de investigación singulares de ámbito autonómico y naturaleza singular; el de centros singulares de investigación, vinculados a universidades y campus específicos pero disponibles en convocatorias abiertas para la incorporación de grupos de otras universidades; y buscarán fórmulas de cooperación en red entre unidades estructurales físicamente no integradas en las estructuras anteriores.

En el caso de la financiación, el acuerdo marco dice que el SUG "es uno de los peor financiados del Estado". Por ello, y mientras que no entre en vigor un nuevo plan, los tres rectores coinciden en demandar al la Xunta "un esfuerzo económico suficiente" para no perder las universidades oportunidades ni que se debiliten sus capacidades docente, de investigación y de transferencia de resultados en el momento de la integración al Espacio Europeo de Educación Superior.

Al respecto, Barro aclaró que no se trata de "pedir por pedir", sino de "ser rigurosos en la ejecución de los recursos" y de trabajar por "objetivos de interés común" y abogó por "ganarse el crédito público y político para conseguir una mayor financiación de las administraciones públicas y, en particular, de la Xunta".

En esta línea, el rector de Vigo, Alberto Gago, comentó que los "principios básicos" del nuevo plan de financiación los están discutiendo los vicerrectores con la Xunta para materializar el nuevo plan de financiación universitaria, y resaltaron como objetivo alcanzar el 1,5 del PIB en 2015, cuando en la actualidad ronda el 0,75. También reclamó financiación estructural para I+D que sea estable.

Tras comentar que, "en otros países son las administraciones las que lideran apuestas de este tipo, singulares en beneficio colectivo", el rector de la USC defendió el compromiso de las tres universidades porque Galicia "necesita de la inteligencia colectiva" para estar en el grupo de los países más desarrollados en la sociedad del conocimiento.

"No podemos hacer más con menos, e ignorar o desatender sin más las necesidades de las universidades lleva sin remisión a debilitar su eficacia como instituciones imprescindibles y centrales en una sociedad que aspira a tener una mayor calidad de vida".

El acuerdo reclama por tanto del Gobierno gallego "un firme compromiso" en la cofinanciación de los polos o contornos científico-tecnológicos singulares, "en particular de las infraestructuras y centros singulares de investigación más desarrollados".DIÁLOGO

"Galicia entera tiene el derecho de exigirle a sus gobernantes y universidades que trabajen desde el diálogo y la cooperación, y más en el actual escenario económico, para aspirar a tener una sociedad mejor y más desarrollada", concluye el texto. "Éste es el espíritu que anima este acuerdo", sentenció Barro.

Coincidió con él su homólogo de A Coruña, quien apuntó que el mensaje "no es fruto de un arrebato" sino que entendieron que "era necesario ponerlo por escrito". También suscribió esta idea el rector de Vigo quien afirmó que se trata de "trazar una dirección por la que seguir transitando las administraciones sin dar bandazos". "Nos hacemos fuertes entre todos", corroboró. "Lo más barato es financiar la cooperación. Lo que sale caro es cuando hay que multiplicar por tres", sentenció Barro.

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