En declaraciones a los medios de comunicación, el presidente de la DPZ, Javier Lambán, explicó que con esta medida la institución pretende ayudar a los municipios en su objetivo de "cambiar el aspecto de sus Cascos históricos", para que "dejen de ser zonas marginales y pasen a integrarse en las ciudades".
El plan cuatrienal, que contempla un Área de Reforma Integral en Ejea (ARI) y sendas Áreas de Reforma de Cascos Históricos (ARCH) en Calatayud y Tarazona, finaliza en 2011 y su mayor impulso ha empezado hace aproximadamente un año.
En Tarazona está prevista la rehabilitación de 76 viviendas del Casco Histórico, así como actuaciones de infraestructura y urbanización con una inversión total de 6 millones de euros a financiar por particulares, Ministerio de Vivienda, Ejecutivo aragonés y Ayuntamiento.
En Calatayud se contemplan 240 viviendas, con un presupuesto total de 13 millones de euros; y en Ejea de los Caballeros hay previstas 114 viviendas a rehabilitar, con un presupuesto de 5,5 millones de euros.
Cada uno de estos ayuntamientos puede recibir este año una aportación provincial para financiar la rehabilitación de viviendas, que se hará efectiva conforme vayan siendo aprobados los proyectos concretos de rehabilitación de viviendas y edificios.
Por último se incluyen también las actuaciones en el Área de Rehabilitación Integral del Núcleo Primitivo del siglo XII de Caspe, cuyo convenio con el Ministerio de Vivienda y el Gobierno de Aragón se firmó en el pasado mes de enero y contempla la rehabilitación de 110 viviendas, así como actuaciones de infraestructura y urbanización del entorno, con un presupuesto total de inversión superior a los 5,5 millones de euros.
La Diputación de Zaragoza, a través de la Agencia Provincial de Planeamiento y Desarrollo municipal, considera estas actuaciones —incluidas en el Plan Estatal de Vivienda y el Plan Aragonés de Vivienda— de interés general para la provincia, coincidiendo con algunos objetivos del Plan Estratégico de la Provincia.
La crisis económica ralentizó el comienzo del plan porque no había demanda vecinal, si bien en este momento hay en marcha numerosos expedientes. La institución provincial pretende facilitar a los ayuntamientos el cumplimiento de su parte y el seguimiento del plan, pese a la "dura" situación de las arcas municipales.
El total de la aportación de la DPZ en tres años asciende a 2 millones de euros, de los cuales 900.000 se aportarán en el presente año, distribuidos entre los ayuntamientos en función de las previsiones de su participación en los convenios en la financiación de las actuaciones de rehabilitación de viviendas. Se aportarán 650.000 euros a Calatayud, 550.000 euros a Ejea, 450.000 euros a Caspe y 350.000 a Tarazona.
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