Esto dejaría el precio del billete ordinario en 1,06 euros, 19 céntimos por encima de la media nacional y 6 céntimos más caro que en Madrid.

Sin pasar por el Pleno

El Gobierno local todavía no se ha pronunciado sobre esta propuesta, pero deberá tomar una decisión sobre la subida antes de que finalice el año. Lo que sí ha trascendido es que planea hacerlo unilateralmente, en Junta de Gobierno, sin llevar el debate al Pleno. Una maniobra que le permite la Ley de Grandes Ciudades.

La propuesta de Vitrasa supone casi el triple del aumento del IPC (4%). Su aprobación en una ciudad en la que hay censado un coche por cada dos habitantes, sería una extraña forma de fomentar el uso del transporte público.

Los más optimistas, como el socialista Xulio Calviño, confían en que finalmente la subida del billete sea bastante menor que la que propone la empresa, al igual que ha sucedido otros años. Además, apunta que el incremento de la tarifa debe pasar por la Junta local de precios.

Más que en Madrid

La subida que pretende Vitrasa haría que coger un bus en Vigo fuera más caro que hacerlo en Madrid. Allí el mismo billete es compatible con la red de Metro y cuesta un euro, 15 céntimos menos que en 2004.

El bono, entre los más caros

Aquí resulta difícil ahorrar, incluso acogiéndose a los abonos de usuario habitual. La tarjeta de trasnporte de Vitrasa recorta el precio por trayecto hasta 0,68 euros, pero esta rebaja, de un 24%, dista mucho de la que se realiza en el resto de España, que ronda de media el 39%. Así, en ciudades como Santander o Valencia, donde el billete univiaje cuesta un euro, el bonobús de diez viajes cuesta cinco euros, permitiendo un ahorro de un 50%.