La asociación vecinal Parque Bruil-San Agustín ya está recogiendo firmas contra el traslado y prepara movilizaciones. «Van a dejar el barrio sin salidas y es muy peligroso poner un rastro junto a una gasolinera», explica Charo Gracia, la presidenta. El concejal de Mercados, Laureano Garín, rebate estos argumentos e indica que la circulación en la zona está garantizada a través de las calles Monreal, Alonso V, Taboada y Jerónimo Vicens.

Aun así, los vecinos entregarán sus firmas y alegaciones a final de semana y están dispuestos a endurecer sus reivindicaciones con cortes de tráfico.

Otros emplazamientos barajados para alojar este mercado son paseo Longares, Braulio Foz, un solar junto al puente de La Almozara, el recinto ferial y el aparcamiento frente al Príncipe Felipe, pero el reglamento exige que esté dentro del Casco Viejo.

El de La Romareda, en negociación

La remodelación de la plaza de Eduardo Ibarra y la construcción del nuevo estadio municipal de fútbol hacen obligatorio el traslado del rastro de La Romareda. El Ayuntamiento y los vendedores ambulantes llevan meses de negociación para decidir su nueva ubicación. Los dos emplazamientos que más gustan a los comerciantes son el Parque Grande y Condes de Aragón. Parques y jardines descarta el Parque; el área de Tráfico, se opone a dejarlo en el distrito Universidad.