El presidente de la Generalitat de Catalunya, José Montilla, y el presidente de CiU, Artur Mas, han acordado este martes una resolución unitaria que votará el Parlament, que plantea un frente común catalán en Madrid para defender el Estatut y propiciar la renovación del Tribunal Constitucional (TC).

Fuentes de ambas formaciones han explicado que los contactos entre Montilla y Mas, antes de iniciarse la reunión de esta mañana del Govern, han acabado de desbloquear el acuerdo al limar los últimos flecos de la resolución, que finalmente constará de cuatro puntos.

El primero reafirma la plena constitucionalidad del Estatut, el segundo insta a Congreso y Senado a proceder de forma inexcusable a la renovación del TC, el tercero incluye una de las exigencias de CiU al emplazar al TC a declararse incompetente para pronunciarse sobre el Estatut, mientras que el cuarto pide reformar la ley orgánica del Constitucional para impedir la permanencia de magistrados con mandato caducado.

Este pacto está ahora pendiente de la actitud de ERC, que ha anunciado que no firmará la resolución pero que la votará en el Parlament, y ante ello CiU estudia ahora cuál será su actitud por lo que consideran una "deslealtad" de los republicanos hacia el presidente de la Generalitat.

Según la propuesta de resolución pactada entre Montilla y Mas, el Parlament expresará su convicción de que el Estatut es constitucional y que ha logrado su "máxima legitimación posible por haber sido refrendado por la ciudadanía a la que tiene que servir", por lo que insta a las instituciones del Estado a "respetarlo, cumplirlo, hacerlo cumplir y a desarrollarlo en aquello que les corresponda".

El segundo punto de la resolución propone que el Parlament se dirija a los presidentes del Congreso y el Senado para que trasladen a diputados y senadores la "urgente e inexcusable necesidad de proceder" a la designación de los magistrados con el mandato caducado o bien a que resuelvan la vacante del magistrado fallecido, por lo que se reclama "desbloquear" el asunto.

En el siguiente apartado, la propuesta de resolución constata los cinco intentos fallidos del Constitucional para dictar una sentencia sobre el Estatut, por lo se entiende que el alto tribunal "no está en condiciones de ejercer las tareas que constitucionalmente tiene asignadas", ante lo que el Parlament "promoverá todas las acciones a su alcance con el fin de conseguir que el TC se declare incompetente".

En su cuarto y último punto, la resolución parlamentaria pide a los grupos catalanes en el Senado que impulsen "en un plazo máximo de 30 días" una propuesta de reforma de la Ley Orgánica del Tribunal Constitucional, con la que se busca impedir la prolongación forzosa del mandato de los magistrados del TC "en los casos de bloqueo de los correspondientes procesos de renovación de sus miembros".