Dos años después de su último CD en directo, el ex componente de Tequila y Los Rodríguez vuelve con una obra muy personal (y cuidada hasta la última nota) que demuestra que ha invertido el tiempo en crecer como músico.

En cada una de sus luminosas once canciones se esconde una verdad, una labor realizada con extremo cuidado y cariño. Este disco es una muestra de buen rock cargado de las más variadas influencias, desde el swing de los años cuarenta hasta el tango argentino, todo ello aderezado con unas letras que hablan de madurez y de estar de vuelta de la vida. Los amores eternos, los tipos duros y las muñecas rotas… todos caben en él.

La madurez que ha adquirido en lo profesional (algo que había demostrado ya en el álbum Lo siento, Frank) también ha llegado al terreno de lo personal.

Pegado a la vida

Aunque tiene las mismas ganas de componer que cuando empezó, ahora le preocupa «mucho más la vida que el arte». Se siente un superviviente y ha cambiado la vida nocturna y sus excesos por los pañales de su segundo hijo, que acaba de nacer.

Esta noche, en la Sala Cormorán, los seguidores del argentino podrán escuchar temas como Dulce y solitario, Fakir o una versión del clásico Como la cigarra.

* Sala Cormorán. San Vicente, 200. Mañana, apertura de puertas a las 21.30 h. Cuesta 15 euros. Entradas en : www.ticktackticket.com (902 150 025), Fnac, Amsterdam, Tipo, Mediamarkt, Carrefur El Saler.

La intensa carrera de un rockero emigrado

El argentino inició su andadura musical con tan sólo 16 años. Desde entonces ha formado parte de grupos como Tequila o Los Rodríguez. Ahora regresa con un disco cargado de todo ese bagaje musical y personal.

Ariel Rot huyó de la dictadura militar argentina cuando sólo contaba 16 años. Madrid fue la ciudad elegida como destino. Allí entró en contacto con el grupo Spoonful Blues Band, que más tarde pasaría a llamarse Tequila, con el que se convirtió en un verdadero ídolo de masas. Años después regresó a su tierra natal, donde conocería a Calamaro en una emisora de radio. Pronto surgió la amistad entre ambos, y Rot empezó a colaborar como guitarrista, compositor y coproductor del futuro cantante de Los Rodríguez. Juntos vivieron una intensa pero breve época dorada, consiguiendo grandes éxitos como Sin documentos. Desde entonces, el músico ha trazado su propia senda, que le ha llevado, a sus 45 años, hasta su séptimo disco en solitario, recientemente publicado.