La llegada este verano de Cristiano Ronaldo al Real Madrid supuso reunir en la Liga española a los dos mejores jugadores del mundo. El Balón de Oro de 2009 llegaba a nuestro pais a medirse con el que previsiblemente (confirmado más tarde) iba a ser el de 2010: Leo Messi. Empezó el duelo por ser el mejor futbolista del planeta.

La temporada ha confirmado que se trata de los dos jugadores más determinantes del planeta. En Liga han desequilibrado el torneo hasta níveles nunca vistos, la española es la competición más desnivelada de Europa y han provocado que parezca más la liga escocesa que la más fuerte de Europa (siempre con permiso de la inglesa).

La influencia del 'crack' portugués en el juego madridista tras volver de su lesión desataron los elogios hacia el jugador blanco, levantando admiración por su juego pero también odio por su carácter.

Messi no se quedó atrás en su rendimiento durante toda la temporada y el último mes del argentino ha eclipsado al luso. El debate en los últimos días no se centra en quien de los dos es mejor sino en si el argentino es o va a ser el mejor jugador de la historia.

El clásico es la gran oportunidad de Cristiano para reivindicarse. El portugués vino a Madrid para ser el mejor jugador del mundo y sabe que está ante su gran ocasión de demostrar que puede plantar cara al azulgrana. Una victoria del Barça unido a una exhibición de Messi daría por zanjado casi definitivamente el debate. Messi se encumbraría como el mejor.

Números en Liga

En cuanto a las cifras, ambos presentan un porcentaje bastante similar de goles marcados. Sin embargo, la lesión del luso a principio de temporada hace que el argentino sea sin ningún tipo de discusión el máximo artillero de la Liga, seguido de cerca únicamente por Higuaín.

Ronaldo ha jugado 21 partidos de Liga, en los que ha marcado 18 goles, una cifra espectacular a siete partidos del final de la Liga, pero insuficientemente para luchar por el Pichichi.

Ligeramente superior es la media de Messi en Liga. El argentino ha anotado 26 goles en 28 partidos y está batiendo todos los récords. Si sigue en el momento de forma actual, puede acabar con una cifra impresionante para un jugador que además no actua de delantero nato.

Europa: igualados sólo en lo individual

En la Champions League, el rendimiento de ambos jugadores ha sido también muy bueno, pero en este caso con resultado distinto en el colectivo. Mientras el FC Barcelona ya está en las semifinales de la competición, el Real Madrid cayó en octavos de final por enésima vez consecutiva.

Poco se puede reprochar al rendimiento del portugués en la máxima competición continental. Con siete goles en seis encuentros, el madridista siempre ha dado la cara. En la decisiva eliminatoria ante el Olympique de Lyon, marcó el único gol del equipo, pero resultó insuficiente.

Más decisivo ha sido Messi para su equipo. Pese que empezó flojo en la fase de grupos, cuando ha llegado la hora de la verdad ha estado sobrenatural. Dos goles suyos en el Camp Nou condenaron al Stuttgart en octavos y su exhibición el otro día ante el Arsenal con cuatro goles le han encumbrado. Lleva ocho en diez partidos. Peor media, pero más decisivos.

De momento, Leo Messi está por delante de Cristiano Ronaldo, pero en este partido no cuenta lo que haya pasado con anterioridad. Ambos parten de cero en el duelo por la supremacía del fútbol mundial, al menos a nivel individual.