El Gobierno laborista de Gordon Brown va a proponer antes de las elecciones, que se celebrarán a más tardar el 3 de junio, la supresión de la Cámara de los Lores, cámara alta del Parlamento cuyos miembros no son elegidos en las urnas.

Los rotativos británicos The Sunday Times y The Sunday Telegraph informan este domingo de que el ministro de Justicia, Jack Straw, dará a conocer próximamente esta iniciativa, que supondrá el mayor cambio del sistema político del Reino Unido de las últimas décadas.

Se trata también de una maniobra política del Gobierno en vísperas de unas elecciones a las que el laborismo acude como perdedor, según las encuestas, ya que la mayor parte de los ciudadanos aprueban eliminar los privilegios de sus miembros.

Cargos hereditarios

La Cámara de los Lores se compone de Pares del Reino (cargos hereditarios), Pares Vitalicios (cargos creados por la reina en agradecimiento a las personas que han realizado algún servicio público destacado) y Pares Espirituales, que son los arzobispos de Canterbury y de York, los obispos de Londres, Durham y Winchester, así como otros 20 obispos de la Iglesia de Inglaterra.

La supresión de la cámara es rechazada por destacados miembros del Partido Conservador, partidarios de mantener una tradición esencial de la democracia británica, y los estrategas laboristas confían en que un debate sobre este tema permita presentar a los tories como comprometidos con los viejos privilegios.

La clase política británica atraviesa su peor momento de credibilidad en muchas décadas después de que el año pasado se destapara el escándalo del abuso generalizado que hacían los parlamentarios de los gastos asignados para su segunda vivienda.

Lo que propondrá Straw, aseguran los citados periódicos, es crear una cámara alta compuesta por 300 miembros (frente a los 704 actuales), elegidos democráticamente al tiempo que la Cámara de los Comunes (cámara baja) y renovable por tercios cada cinco años, con un sistema parecido al del Senado estadounidense.