Nada de cinco candidatas a la mejor película: este año, diez. De un presentador único, Billy Cristal, Whoopi Goldberg o Hugh Jackman, a un par de veteranos: Alec Baldwin y Steve Martin. La presencia de Avatar, la película más taquillera de todos los tiempos. Y protagonismo español: Penélope Cruz, un corto de animación y una coproducción con Argentina aspiran a recoger galardón. Los Oscar 2010 apuestan por el más y mejor.

Un buen año en taquilla

Y es que, viendo cómo van las cosas, Hollywood no puede quejarse. 2009 fue el año más taquillero de la historia en EE UU: los 7.124 millones de euros obtenidos en 2007, récord hasta ahora, se pulverizaron al venderse entradas por valor de 7.809 millones. Una buena noticia que se refleja en la ceremonia: ABC, cadena que la emite, vendía en 2008 treinta segundos de publicidad por 1,24 millones de euros.

La crisis de 2009 hizo que la tarifa bajara a menos de un millón, pero este año vuelven a subir los precios. Hyundai o Coca-Cola pagarán 1,2 millones por medio minuto. Anunciantes como General Motors se bajan del carro.

Tanto ABC como la industria esperan, eso sí, que la audiencia sea mejor que las de los últimos años. El desastre llegó en 2008, cuando sólo 32 millones de estadounidenses contemplaron la gala. La cifra mejoró algo en 2009, con unos 36 millones, pero lejos de los registros de antaño. Y, sobre todo, de los de 1998, cuando la gran noche de Titanic y James Cameron fue contemplada por más de 55 millones de estadounidenses.

¿Hablamos de Cameron? El morbo de ver cómo su Avatar se enfrenta a En tierra hostil, dirigida por su ex Kathryn Bigelow, puede disparar la audiencia. No hay una clara favorita: ambas se pagan en las apuestas de Internet en torno al dos a uno. Lo mismo pasa con Sandra Bullock y Meryl Streep en la categoría de mejor actriz.

Jeff Bridges, en cambio, sí parece claro vencedor: si su Corazón rebelde es premiado, cada dólar se convertirá en seis (la victoria de George Clooney por Up in the Air, por ejemplo, se paga 13 a 1). Pero el que parece más claro ganador es Christoph Waltz por su secundario en Malditos bastardos: apostar 40 dólares por él sólo aportaría un dólar de beneficio.

Prohibido el paso

Los que no se acercarán al Kodak Theatre serán el cómico Sacha Baron Cohen y Nicolas Chartier, productor de En tierra hostil.

El primero iba a protagonizar un número humorístico sobre Avatar, en el que se disfrazaba de Na’vi embarazada. ¿Embarazada de quién? De James Cameron, por supuesto. Era tan grosero que los organizadores pensaron que el director, cuyo mal humor es célebre, no le encontraría la gracia, por lo que optaron por despachar al protagonista de Brüno.

Respecto a Chartier, no le han perdonado su petición ilegal de votos. No es la única polémica con En tierra hostil: un soldado, Jeffrey S. Sarver, acaba de demandar a la película por "reflejar sin permiso" sus andanzas en Irak. Por supuesto, no sólo quiere una mención en los créditos, sino también un buen puñado de dólares.

La más elegante

Los amantes de la belleza masculina están de enhorabuena: Gerard Butler, Bradley Cooper, Tom Ford, Jake Gy- llenhaal, Chris Pine, Keanu Reeves, Ryan Reynolds y Sam Worthington darán premios.

En el bando femenino, Barbra Streisand, Kathy Bates o Charlize Theron. Para que los más jóvenes también piquen el anzuelo, estará la pareja Disney, Miley Cyrus y Zac Efron, y los crepusculares Taylor Laut- ner y Kristen Stewart.

¿Y Penélope Cruz y su candidatura por Nine? Lo tiene difícil porque Mo’Nique, con Precious, es favorita como mejor actriz secundaria. Pero la española ya tiene un título: según Entertainment Weekly, el vestido Versace que lució en la gala de 2007 fue el que "mejor representó el estándar de la moda de los Oscar en las últimas dos décadas". Las rivales eran de peso: Nicole Kidman y su Galliano de 1997 y Julia Roberts y su Valentino de 2001, entre otras.