¿Paris? No, este es Perez, Perez Hilton. En realidad, Mario Armando Lavandeira. Escogió ese seudónimo en honor a sus raíces hispanas y a la nieta del magnate hotelero. Él idolatra a esa niña… bueno, él siente pasión por casi todas las celebrities. O, mejor dicho, él lo que siempre ha querido es ser una de ellas, que le invitaran a sus fiestas, codearse con la gente guapa, que hablaran de él… Presume de que su blog es el más odiado de Hollywood. Allí airea los trapos sucios de las estrellas y otras famosas descarriadas, así es como se ha hecho popular.

Muchos le achacan que la hija de Billy Joel, Alexa, se cuestionara su valía para el modelaje después de que Perez la tachara de fea durante meses en su bitácora. Alexa no es tan fea, pero esa página la siguen más de ocho millones de personas, tuvo que dolerle. También escribió que Avril Lavigne tenía un brazo anormalmente largo y puso la foto al lado para demostrarlo ¡qué risa! Y que la hija mayor de Demi Moore tenía unos pies espantosos. Luego criticó los modelitos que la joven lucía en las fiestas, que si demasiados escotes para su edad, muy cortas las faldas… y aquello dejó de tener gracia. Al menos para la madre de la niña, que a través de su Twitter acusó al bloguero de "apología a la pornografía infantil". Algunos no entendieron por qué Pérez se metía en estas lides, porque quién es él, que cada semana se tiñe el pelo de un color -el rosa es su favorito- y ha llegado a posar en calzoncillos y sacando barriga, para decir cómo ha de vestir nadie.

Y lo de Victoria Beckham…Pérez había pintarrajeado una foto de la ex Spice con la frase: "Soy una guarra" (él siempre imprime alguna máxima sobre las imágenes que publica, le encanta). Antes la había llamado "alienígena" y "robot con tetas de goma". Contra todo pronóstico, la británica trató de hacerse amiga suya nada más aterrizar en Los Ángeles. Quizá pensó que Hilton era influyente y que la introduciría en el círculo de las celebridades. Ella no sabía que muy pocas starletts le soportan, casi todas han sido víctimas de sus post envenenados. Eso pasó… ¿antes o después de que Forbes designara a Pérez por primera vez el personaje más famoso de Internet? Ahora el chico va por su tercer título y está eufórico. Dicen que ha amasado una gran fortuna, incluso Zara pagó por publicitarse en su web. Tiene su propia línea de ropa, un programa de radio, ha escrito dos libros, le invitan a los programas… En estos le reciben como a un profeta.

De empollón… a 'marica mala'

Pérez tiene una sonrisa grande y llena de dientes relucientes. Ojos azules. Pluma. Además posee una estupenda dicción inglesa: da gusto escuchar cómo vocaliza cada palabra. Durante su infancia estudió becado en un colegio de jesuitas de Miami que sus padres, inmigrantes cubanos -hijos a su vez de gallegos-, no se habrían podido permitir. Era empollón. También sacó buenas notas cuando se trasladó a Nueva York para cursar Arte Dramático, su carrera frustrada. Hace cinco años un amigo le aconsejó escribir un blog… y se convirtió en "la mariquita mala" de la Red, "la reina de los medios", como él mismo se autoproclamó.

Regordete y con un par de mofletes generosos que, seguramente, mamá Teresita apachurraría con delicia en su niñez, Pérez ha convertido la burla en su arma más poderosa. "Lo que necesita la gente es risa y entretenimiento, sobre todo en tiempos de crisis, y eso lo que yo suministro", se justifica. Lo hace durante 17 horas al día, las que dice que trabaja. Y ha cobrado seguridad: "Antes era un tipo poco agraciado y con problemas de socialización. Ahora hace ejercicio y tiene otro ánimo”, asegura su amiga Katy Perry.

Por si a alguien le interesa, no tiene pareja.

Los logros de Hilton

El poder de su bitácora, la web 184 más leída en Estados Unidos, la 551 del mundo según Alexa y la segunda en la categoría de celebrities según Alianzo, es una referencia para el mundo rosa. A ella se atribuye el éxito del cantante Mika, a quien Perez Hilton promocionó con pasión cuando el artista era aún un desconocido.

En 2008, el bloguero fue nombrado el hispánico del año por Terra.com y el año pasado llevó el debate de las bodas homosexuales al certamen de Miss EE UU donde puso en un brete a Miss Caliornia al preguntarle sobre este extremo.

Gay reconocido, ha trabajado para sacar del armario (outing, en inglés) a muchas celebrities con la intención, dice, de que el colectivo "se haga visible". Lo logró con Neil Patrick Harris. Sus intentos por que John Mayer o Lance Bass confiesen su presunta homosexualidad han provocado las iras de los interesados. También los reproches del Colectivo de Gays y Lesbianas de EE UU, que rechazan sus maneras agresivas.

Por Clara Hernández. Sígueme en Twitter.