Un traidor, Tarsicio, anunciará hoy que Diego de Marcilla murió en la guerra. Es lo necesario, para que Pedro de Azagra consiga desposar en matrimonio a Isabel de Segura que, llevaba cinco años esperando a que su amado Diego volviera de buscar fortunas para poder casarse con ella. La familia de Segura ya no tiene más excusas, así que mañana contraerá matrimonio con el señor de Albarracín lo que acabará desencadenando la muerte, por amor, de Diego e Isabel. Teruel volverá a recrear la Leyenda de sus Amantes y volverá a vivir por unos días en el año 1217.

La gerente de la Fundación Bodas de Isabel, Raquel Esteban, ha asegurado que todo está listo para la fiesta y ha destacado que "hoy vivimos la metamorfosis, Teruel ya se está preparando para la fiesta". Además, ha señalado que "la parte teatral ya está, y también parece que nos pronostican buen tiempo", así que ha confiado en que "todo salga a pedir de boca".

Esteban ha apuntado que Diego e Isabel, Elisa Muñoz y Guillermo Gil, forman este año una pareja que "funciona muy bien, es una pareja muy compacta. Son dos actores que desarrollan de una forma muy natural la parte teatral, la oral y la corporal". Además, ha asegurado que "son muy dinámicos, son la pareja que más metros lisos hacen en el balcón; son concienzudos y muy serios en lo que están haciendo".

Como siempre, también este año habrá sorpresas en la recreación de la Leyenda. Aunque Esteban ha sido muy críptica a la hora de desvelarla, ha señalado que "gira sobre un elemento que los unía antes de que Diego se marchara, una especie de conjuro de su relación que, queda como una especie de prenda en el corazón de Isabel que le ayuda a pasar los cinco años y que reaparece cuando vuelve Diego".

Teruel se prepara para vivir una fiesta que implica prácticamente a toda la ciudad: más de 5.000 personas forman parte de los 140 grupos y se instalarán otras tantas haimas; se realizarán 60 actos recogido en el programa que incluyen la representación de la Leyenda, pero también otras recreaciones que hacen más sencillo sentirse en pleno SXIII, habrá 200 puestos en el mercado medieval y unas 450 personas velarán por la seguridad y el buen desarrollo de la fiesta.