Según indicaron a Europa Press fuentes de esta empresa, que posee oficinas en Málaga y en Sevilla, en este último año 2009 el incremento de consultas y de casos atendidos se ha incrementado "aunque no tanto como la gente se pudiera imaginar, porque en El Cobrador del Frac somos selectivos y nos dedicamos más a profesionales y empresas, desechamos algunos casos".

Tras destacar que la empresa en este último año "ha estado en la misma línea, intentando ofrecer calidad al cliente", las fuentes sí reconocieron que se está incrementando el número de trabajadores de la empresa en concreto en el área de personal de gestión de cobro en todas las delegaciones "e incluso estamos buscando cobradores de uniforme".

"morosos profesionales"

Precisaron que la morosidad "es algo que aunque empezó en ciertos sectores, ahora está extendido y generalizado en todas las áreas", tras lo que las fuentes aseguraron que está proliferando los casos de "morosos profesionales", esto es, "personas que pueden pagar pero que están continuamente engañando de la gente".

Explicaron que dicho aumento viene motivado por el hecho de que "sea muy fácil dejar de pagar en ese país, donde existe una impunidad a nivel judicial, al demorarse mucho los procesos que se inician por vía judicial para reclamar una deuda, a lo que se suma el hecho de que ahora los juzgados estén colapsados con los concursos de acreedores".

Las fuentes apuntaron que la demanda de los servicios de 'El cobrador del frac' en Andalucía "es superior al de otras zonas, como el norte del país".

Ya el año pasado, a raíz del aumento de las consultas, 'El cobrador del frac' explicó que desde 2008 decidió ampliar su plantilla en un 42,8 por ciento para atender a la demanda, pasando de 350 trabajadores en España y Portugal a 500 trabajadores en toda la Península. De esta forma, en Sevilla y Málaga trabajan actualmente entre 80 y 90 personas.

'El Cobrador del Frac', que tiene oficinas en Sevilla y Málaga, es una empresa especializada en el cobro de deudas para que exija el pago. Su método se basa en la 'persecución' del deudor. Los honorarios que cobra la empresa son proporcionales a la deuda que se debe cobrar y al tiempo que requieren sus agentes para que el crédito quede solventado.