AMPL.- Ayuntamiento liberará 18 millones para acabar sin plazo Metropol, que cuesta ya más de 50 millones

Celis admite que el proyecto "era imposible" porque "no existía la tecnología necesaria" y confía en retomar la obra en primavera

El Pleno del Ayuntamiento de Sevilla aprobará mañana liberar partidas de 2007 sin ejecutar por valor de 18 millones de euros para terminar, sin plazo, el proyecto de Metropol Parasol de la Encarnación, que ya le cuesta al Consistorio hispalense más de 50 millones, según anunció hoy el concejal de Presidencia y Urbanismo, Alfonso Rodríguez Gómez de Celis.

En rueda de prensa, Gómez de Celis explicó que mañana se aprobará en el Consejo extraordinario de la Gerencia de Urbanismo y en el Pleno municipal el segundo modificado del proyecto, que supone un incremento presupuestario de 18 millones de euros, para lo que se liberarán las partidas necesarias.

En concreto, se dará uso a unas partidas de 2007 no ejecutadas. Dos de ellas, que suman 14 millones, son las que estaban destinadas al paso soterrado del Tamarguillo, que finalmente se financia con fondos del Proteja, y a Tablada, sobre lo que no habrá movimiento mientras no haya una solución jurídica, y el resto son "partidas genéricas menores, fundamentalmente para redacción de proyectos que no se han hecho".

"Entiendo que este proyecto constructivo era imposible, desde que el arquitecto alemán Jürgen Mayer, ganador del concurso de ideas internacional, lo dibujó su ejecución ha pasado por momentos de gran incertidumbre", admitió Celis, quien insistió en que "el Ayuntamiento hizo suya la elección del jurado de aquel concurso y Metropol ha sufrido periodos de dificultad para convertir la idea en una realidad que día a día se está observando".

Asimismo, reconoció que "en aquel instante, cuando se decidió hacerlo, no existía la tecnología necesaria para ejecutar este proyecto", lo cual "ha hecho que se haya demorado hasta en cuatro ocasiones la fecha de terminación de las obras, desde el primer plazo en junio de 2007, otro en primavera de 2008, último trimestre de 2009 y principios de 2010".

En este sentido, precisó que "en la ejecución han aparecido causas no previstas por la complejidad de las estructuras que soportan la madera de los parasoles, que es la primera vez que se realice en el mundo, sin que exista ninguna otra obra de referencia a nivel global".

Del mismo modo, aludió al impacto de la crisis económica, que "ha frenado la capacidad de la empresa adjudicataria —Sacyr—, porque no encontraba liquidez en los bancos para la financiación que necesitaba para continuar el proyecto".

Por todo esto, explicó que "el arquitecto redactor presentó una solicitud de modificación del proyecto y el cuerpo técnico de la Gerencia de Urbanismo ha dado el visto bueno después de muchos meses trabajando en esto".

Concretamente, apuntó que las modificaciones incluidas están relacionadas con la estructura de los parasoles, una vez hallada la tecnología necesaria para la cobertura de los parasoles, y con otros aspectos solicitados por el Ayuntamiento, entre otros de seguridad, detalles del mercado y del pavimento del entorno.

Para esto, según relató el edil socialista, "la empresa de ingeniería más prestigiosa del mundo", que ha trabajado en construcciones tales como la Ópera de Sidney (Australia), ha realizado hasta "siete complejos cálculos".

Así, informó de que remitirá el expediente al Consejo Consultivo de Andalucía, para contar con una mayor seguridad jurídica, y al PP, con cuyo portavoz adjunto Francisco Pérez dijo haber mantenido hoy una conversación para poner a su disposición toda la documentación que requiera. "Esperamos contar mañana con el apoyo del PP, puesto que su portavoz, Juan Ignacio Zoido, ha manifestado que está a favor de que la obra se termine y como la aprobación plenaria es el paso definitivo para que se pueda terminar le tendemos la mano para que nos acompañe", añadió.

"no estoy dispuesto a perder ni un segundo"

"Tras meses de negociación con Sacyr soy consciente de la premura de los plazos y no estoy dispuesto a perder ni un sólo segundo", sentenció Gómez de Celis, quien consideró que "es una obra que la ciudad necesita ver acabada y se va a hacer todo lo humanamente posible para que así sea".

Por tanto, dijo creer "firmemente" en el proyecto, que a su juicio permitirá "despegar económicamente a una zona olvidada", como "se le debe a los placeros de la Encarnación después de 36 años", y anunció que se elaborará en colaboración con Aprocom un estudio del impacto económico que va a suponer el proyecto.

En cuanto al coste total que Metropol Parasol ha supuesto hasta ahora para las arcas municipales, estimó que superará los 50 millones, ya que a los 25 millones del presupuesto inicial se unen un primer modificado de 7 millones y este segundo, de 18 millones. No obstante, aclaró que no se sabrá con exactitud hasta que no termine la obra.

Sin plazo

De otra parte, Gómez de Celis rehusó dar plazos argumentando que "la complejidad constructiva que queda por delante hace ser prudentes" y reiteró que "es el momento de decir alto y claro que era un proyecto imposible y que se va a hacer, pero hay que ser cautos". En esta línea, apostó por "ver primero cómo van los primeros enlaces entre los distintos troncos de los parasoles y a partir de ahí se podrá dar una fecha más concreta".

Sin embargo, avanzó que "el mercado sí puede estar terminado antes, sólo falta incorporar toda la infraestructura propia de los puestos —cámaras frigoríficas, mostradores, etc.—, lo que no conlleva tanto tiempo ni complejidad", aunque "habrá que saber si hay plena seguridad por parte de la adjudicataria de que se puede abrir el mercado mientras se trabaja en los parasoles".

De este modo, concretó que una vez aprobado el proyecto modificado por parte del Consejo Consultivo de Andalucía, que confió en que sea "lo más rápido posible", se retomará la obra, por lo que confió que "en primavera ya esté la obra a pleno rendimiento".

Por último, justificó la decisión tomada en su día de abordar la construcción de este proyecto pese a su dificultad técnica: "Los que tomaron la decisión no sabían que ni siquiera la empresa de ingeniería más prestigiosa del mundo tenía esos conocimientos, ninguno de los que tomaron la decisión tenían esta información, ni la empresa adjudicataria, porque entonces no se hubiera presentado al concurso".

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