Puede parecer un ejercicio absurdo, pero no lo es. A cada niño vigués le corresponde 1,2 m2, poco más de cuatro hojas de periódico extendidas, para jugar en los parques infantiles, según los cálculos realizados a partir de los datos municipales.

En cifras

Vigo cuenta con 99 parques infantiles que suman 33.279 m2 de superficie total. Las zonas de juegos se dividen por edades y, por lo general, los 12 años es la edad máxima permitida.

En la ciudad hay un total de 26.189 niños de dos a 12 años, por lo que a cada uno le corresponde una superficie de 1,2 m2 para jugar en los parques infantiles.

En Santiago, por ejemplo, a cada niño le tocan 2,6 m2, con sus arenales, toboganes, columpios y balancines. La capital gallega tiene menos parques infantiles que Vigo (40), pero mayor superficie total: hay 34.737 m2 de zonas de ocio para niños, 1.458 más que en Vigo.

Haciendo más cálculos, en cada parque infantil vigués tendrían que jugar 264 niños mientras, en Santiago, cada zona sería compartida por 327 niños entre los dos y los 12 años.

Nuevos parques

El Concello tiene previsto instalar tres nuevas zonas de ocio infantil antes de que acabe el año, que sumarán unos 950 m2 de superficie de juegos. Además, mejorará las instalaciones existentes ya en la calle Estrada.

En la calle Atalaya: Habrá un nuevo parque infantil con unos 300 m2.

En la Praia da Fontoura: En Bouzas. Ya está en construcción. Tendrá 400 m2.

En la calle Canario: Con 250 m2. Ya está en obras.

Una media de 336 m2 por parque

La superficie media de los parques infantiles vigueses es de 336 m2. Los más grandes son los de Castrelos, con 5.355, y O Castro, con 3.500 m2. El más pequeño es el de la feria de Valladares, que sólo tiene una superficie de 23 m2. Para que jueguen 20 niños.

Cristina Benito, tiene dos niños de tres y cinco años. «Además de más parques y zonas verdes, hace falta que se cuiden los que existen. Cerca de la plaza E hay un parque recién inaugurado y el otro día ya se desarmó un caballito. Sigue estropeado».

Javier Sanz, padre de dos niños. «Sería bueno que hubiera más instalaciones deportivas al aire libre y también más parques. En el centro, el único sitio con recursos y espacio suficiente es el Castro. En el resto están como sardinas en lata».

Ruth Galocha, madre de un niño de tres años. «Yo vivo en Castelao, y allí afortunadamente hay más zonas verdes que en otros barrios. Pero hacen falta más dotaciones infantiles, porque los niños tienen que hacer cola para subirse a los columpios».