Un grupo de activistas protesta en Valencia contra el uso de animales en los circos

  • Se han encadenado semidesnudos o con los cuerpos pintados.
  • Piden al Ayuntamiento de Valencia que prohíba el espectáculo.
Protesta de miembros de Animanaturalis contra un circo en Valencia este domingo 3 de enero de 2010.
Protesta de miembros de Animanaturalis contra un circo en Valencia este domingo 3 de enero de 2010.
ANIMANATURALIS
Protesta de miembros de Animanaturalis contra un circo en Valencia este domingo 3 de enero de 2010.

Un grupo de activistas de la asociación en defensa de los animales AnimaNaturalis se ha manifestado este domingo frente a la plaza de toros de Valencia, donde se encuentra instalado un circo para protestar por la utilización de animales en los espectáculos de circo. Algunos activistas se han manifestado encadenados, semidesnudos y con sus cuerpos pintados como tigres, leones y elefantes mientras que otros han gritado lemas en contra de la explotación y maltrato de focas, dromedarios, elefantes, tigres, leones y rinocerontes.

Frente a esta protesta, algunos de los trabajadores salieron del recinto disfrazados de animales para bailar alrededor de los manifestantes. Los asistentes a la concentración respondieron gritando "este circo se ríe de los animales". La responsable de AnimaNaturalis en Valencia, Elisa Arteaga, dijo que saben que el circo da puestos de trabajo, pero propuso "sustituir los números de animales por los de personas".

La asociación ha reclamado al Ayuntamiento que considere la posibilidad de prohibir en la ciudad este tipo de circos que "maltratan física y psicológicamente a los animales en entrenamientos y funciones" y "les condenan a una vida precaria y en estado de cautiverio extremo". También han pedido a la población que no asista a ningún circo que utilice animales para el entretenimiento.

Según AnimaNaturalis, el uso de animales en circos ha sido prohibido o restringido en ciudades como Barcelona, Buenos Aires, Santiago de Chile y Sao Paulo, y en países como Suecia, Suiza, Dinamarca, Irlanda, zonas de Inglaterra y Estados Unidos.

"Los circos, que merecen el mayor respeto por su trashumancia, antigüedad y tradición, deben evolucionar en este mundo cambiante hacia una nueva forma que, sin quitar la ilusión de los más pequeños, ofrezca una imagen centrada en las habilidades, el arte y la vistosidad, pero evitando, ya definitivamente, la presencia de animales" en sus espectáculos, ha manifestado la organización.

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