Por lo visto estaba buscando el teléfono de su hija en la agenda cuando el móvil, un GX-15 adquirido hace 10 meses, explotó provocándole una hemorragia y serias heridas en dos dedos de la mano izquierda.
El músico, que se queja de estar muy afectado psicológicamente y no poder trabajar, ya ha interpuesto una demanda ante la Guardia Civil, que está examinando los restos del móvil en un laboratorio.
Su abogado ha confirmado que, en caso de no prosperar por la vía penal, acudirán a la vía civil.
Desde Sharp confirman que existen precedentes de explosiones, pero no en Sharp, sino en otras compañías. En el 2003 por ejemplo estallaron varios Nokia en los que se habían empleado baterías ilegales, es decir, no homologadas.
En la tienda dónde el demandante adquirió el teléfono aseguran que únicamente venden móviles y componentes nuevos.
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