Habla español con acento delicioso y una voz joven que sale de su boca de 71 años. Es un viejecito simpático al que cualquiera escucharía embelesado durante horas. Algunos curiosos le observan en el interior del auditorio de la Fnac en Madrid. Muchos se preguntan quién es. Ignoran su caladura. El Dalí del cómic. Un genio vivo de personalidad dual.
Por un lado está Giraud (también Gir, su abreviatura), un dibujante de trazo realista, prolífico creador del teniente Blueberry, que desde su creación en 1964 y hasta la actualidad ha vendido millones de ejemplares en todo el mundo.
Por el otro está Moebius, su álter ego onírico, de líneas surrealistas que tienen su máxima expresión en El Incal, Arzak y la mítica revista Metal Hurlant, que él mismo creó con otros talentos como Druillet. A muchos les sorprende descubrir que dos líneas tan dispares nacen de una misma mano.
Sus 'herramientas'
"Siempre he usado la hierba como una herramienta, creo que no es droga bajo esta perspectiva", aclara. "Es droga cuando se usa para el placer; también fui una víctima de eso, pero ya no me interesa".
Su última experiencia en este sentido fue en 1965, un año después de empezar a publicar Blueberry. "Tomé hongos, fue una experiencia muy difícil, es como el LSD pero peor. Necesité casi una vida para transformar esa experiencia de seis horas".
Ese día nació Moebius. "Todo lo místico y onírico vino de esa experiencia", reconoce ahora.
Creación sin aditivos
Su bloc le acompañó a todas partes durante siete años. "Cada vez que tenía un rato, en el avión, antes de irme a dormir, en el autobús, hacía una página o dos. Fue una improvisación total". Acabó convirtiéndose en Inside Moebius, su obra más introspectiva, cuyos dos primeros volúmenes (de un total de seis) han sido publicados por Norma en español este mes.
Inside Moebius es una catarsis para sus angustias interiores y su conmoción ante el 11-S, plasmada en una charla con Bin Laden. Pero ante todo es un "viaje a la locura, una aventura a un país desconocido", donde su 'yo' en las viñetas se cree Dios, pues como creador puede dar la vida o la muerte a sus personajes.
Un talento también de cine
También se hizo notar en filmes animados como El pequeño Nemo y Los amos del tiempo. Dos proyectos se quedaron en el camino: Cita con Rama, de Arthur C. Clarke, dirigida por David Fincher y producida y protagonizada por Morgan Freeman; y la faraónica Dune de Alejandro Jodorowsky, un filme de ocho horas de duración que no llegó a rodarse. Una "ambición desmesurada", la califica Giraud. "Habíamos puesto tanto, y la frustración fue tan fuerte que tuvimos que encauzar toda esa energía... Así nació El Incal".
No pases de...
(tres citas obligadas para poner los sentidos a tono)
UNA PELÍCULA
Tan parecido era el guión de la película a El Incal de Jodorowsky y Moebius que éstos interpusieron una demanda por plagio. Fue desestimada, pero se admitieron las semejanzas. (Luc Besson. 9,95 euros).
UN DISCO
La mejor banda sonora para el universo de su tocayo y compatriota Jean Giraud (Moebius). (The Complete Oxygène. Dreyfus (3CD). 36,60 euros).
UN LIBRO
Comentarios
Hemos bloqueado los comentarios de este contenido. Sólo se mostrarán los mensajes moderados hasta ahora, pero no se podrán redactar nuevos comentarios.
Consulta los casos en los que 20minutos.es restringirá la posibilidad de dejar comentarios