Euskadi soportó este jueves el temporal total. Se congregaron todos los ingredientes en el mismo día: lluvia continua con fuertes aguaceros, granizo, viento de 100 kilómetros por hora en el litoral, olas que llegaron a los ocho metros de altura en el Cabo Matxitxako y las primeras nieves de la temporada a partir de los 1.300 metros.

Y ante este panorama, vimos las habituales estampas de estos días. Por la mañana, quienes decidieron ir en coche a trabajar sufrieron largas caravanas en las inmediaciones de la A-8 en Bilbao. Claro, con tanta agua, había balsas en la carretera, circulación lenta, accidentes leves en los arcenes, etc.

Muchos arrantzales y gente de la mar pasaron el día en casa. El Puerto de Bilbao tuvo que cerrar el tránsito en ocasiones por el oleaje, mientras que el puerto de Pasaia estuvo cerrado todo el día y lo seguirá al menos esta mañana.

Oleaje fuerte

Donostia mantuvo clausurado el Paseo Nuevo y el Paseo de Salamanca. Y Bermeo tiene precintado su dique del puerto porque las olas están pasándolo por encima.

Este viernes seguirá lloviendo, aunque el viento perderá fuerza y la temperatura subirá hasta los 15 grados, según Euskalmet.

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