El quebradero de cabeza de Amador Campa tiene los días contados. Este dueño de un taller de reparaciones de automóviles del barrio del Pilar (Fuencarral) debe al Consistorio madrileño más de 120.000 euros por multas del Servicio de Estacionamiento Regulado (SER), pero ya no tendrá que seguir recurriéndolas.

El Tribunal Superior de Justicia de Madrid acaba de ratificar la sentencia de septiembre de 2008 que declaraba "nula" la ampliación de los parquímetros realizada en 2006 a siete distritos de la capital. Por eso, los colectivos vecinales antiparquímetros animan ahora a reclamar al Ayuntamiento de Madrid los importes cobrados en concepto de tarjetas de residentes, multas y tiques del SER.

Formulario para reclamar

Desde marzo de 2006, un millón de madrileños (entre residentes y población flotante) de Arganzuela, Retiro, Chamartín, Tetuán, Fuencarral, Hortaleza y Carabanchel vieron como sus barrios se llenaban de parquímetros y ellos empezaban a pagar por poder aparcar.

Desde entonces y hasta diciembre de 2008 (fecha en el que la ampliación del SER se aprueba en pleno tras la sentencia que la anulaba por un defecto de forma), el Ayuntamiento de Madrid se habría embolsado alrededor de 382 millones de euros procedentes de las multas del SER (cerca de 100 millones por año en las zonas ampliadas), los tiques (25 millones anuales) y las tarjetas de residentes (algo más de dos millones anuales) que muchos vecinos solicitaron.

Tras la sentencia judicial, los colectivos antiparquímetros preparan ya un formulario tipo que todo el mundo podrá descargarse de la web www.parquimetrosfuera.org y con el que acudir a las oficinas municipales de registro y a las Juntas de Distrito a reclamar las devoluciones.

Por su parte, el Ayuntamiento asegura que el defecto de forma "ya está resuelto" y que sólo devolverá las multas recurridas entre la sentencia de septiembre de 2008 y la aprobación de la ampliación en pleno tres meses después.