Qué sería del ciclismo sin esos locos que concibieron pruebas inhumanas y esos pioneros que tuvieron los arrestos de aceptar los envites. Enamorados del espectáculo de la clásica París-Roubaix, uno de los cinco monumentos, una rara avis que basa su esencia en los caminos adoquinados, un proyecto, el del Gran Premio Canal de Castilla, anhela con exportar el mito.

Frente al pavés, testimonial en Castilla, este proyecto plantea atravesar 90 km sin asfaltar por los caminos de sirga que, paralelos al canal, permitían el arrastre de embarcaciones siendo tiradas desde tierra. La idea, unir Aguilar de Campoo (Palencia) y Valladolid. La viabilidad, comprobada in situ por un grupo de trece pioneros, algunos ex corredores, oriundos de siete comunidades autónomas. "Es factible", indica feliz Víctor, uno de los impulsores.

"Para 2010 trabajamos en la organización de la marcha cicloturista y, para más adelante, en la prueba profesional. Queremos trabajar sin plazos y, como fecha, pensamos en el 24 de abril", añade, consciente de los potenciales de un recorrido que atraviesa una de las mecas del Románico en España, se cruza con el Camino de Santiago y redescubre una de las obras públicas más desconocidas, en la que incluso el afamado Lute, junto a Frómista, inició su "camina o revienta".

Los promotores ya han constituido el club desde el que impulsarán su marcha e iniciarán los trámites para ser inscrita en el calendario oficial de la Unión Ciclista Internacional (UCI), la labor más compleja de todas. ¿Una quimera? La Eroica, en Italia, también con tramos sin asfalto, organiza desde 2007 una carrera que antes fue marcha.