La Audiencia de Girona ha suspendido un juicio de tentativa de homicidio al no personarse ni la víctima ni dos testigos, uno de ellos presencial, y todos ellos residentes en Holanda. El procesado, A.O., está acusado de apuñalar a un hombre durante una pelea en la discoteca Tropics de Lloret de Mar el 1 de agosto de 2008.

El fiscal pide seis años de prisión para él, y la defensa pide 11 meses, mientras que la acusación popular --la patronal catalana del ocio nocturno Fecasarm-- reclama el máximo posible para este tipo de delitos, siete años y medio de prisión, además de una multa de 5.000 euros por los daños y perjuicios ocasionados a la imagen del sector del ocio nocturno. El juicio está previsto que se celebre el 11 de noviembre.

Este es la primera vez que la Fecasarm se presenta como acusación popular, aunque no será la única, ya que lo prevén hacerlo en todos aquellos casos en que se perjudique gravemente la imagen de los empresarios del ocio nocturno.