Vicki Walker es, posiblemente, uno de los casos de despido improcedente más curiosos del mundo. Fue despedida hace dos años de su empresa, ProCare, en Nueva Zelanda, porque sólo usaba letras mayúsculas en los correo electrónicos que enviaba a sus compañeros.

Esta contable neozelandesa estuvo dos años en la empresa y ahora ha tenido que esperar otros dos para que la Dirección General de Relaciones Laborales de su país le de la razón y considere el despido improcedente, lo que conllevará una indemnización de 12.000 euros.

Mayúsculas, negritas y rojas

Vicki Walker empleaba con frecuencia las mayúsculas, pero también negritas y el color rojo, así como diferentes tipos de familias, para escribir sus correos, según explican en la Fox, lo cual podía ser señal de violencia, confrontación para la empresa, que decidió que esa forma de escribir los correos a sus compañeros era más que merecedora de despido.

Desde que se quedase sin trabajo en diciembre de 2007 hasta hoy, Walker se ha endeudado hasta el punto de necesitar reunificar todas sus deudas y tener que abrir una segunda hipoteca, según sus abogados, que esperan una revisión del caso de su cliente para una compensación adicional, ya que la actual la consideran insuficiente.

¿Molestan las mayúsculas?

En Internet es habitual encontrar muchos textos, ya sean conversaciones de mensajería instantánea, correos, mensajes en foros... En los que el autor sólo usa mayúsculas. ¿Es molesto para el lector?

En la Red muchos consideran que escribir todo un texto en mayúsculas lleva implícito agresividad, mal humor y falta de educación, algo que no ocurre con las negritas y el color rojo en un texto, por ejemplo.