Blindada por mar y tierra. Así ha estado la isla de Mallorca las tres horas siguientes al atentado de ETA para evitar que los etarras pudiesen salir de la isla. Pero, poco a poco, se va restableciendo la normalidad.

El aeropuerto de Son Sant Joan de Palma de Mallorca ha sido reabierto a las 17.50 horas, una hora y cuarenta minutos después de haber sido cerrado por motivos de seguridad, tras la explosión que ha tenido lugar en Palmanova (Calvià) en la que han fallecido dos guardias civiles, según han confirmado fuentes de AENA.

Esta medida ha afectado a 26 vuelos de salida y 21 de llegada. AENA no ha especificado con cuánto retraso están volando los aviones ni si hay alguna cancelación.

Personal con acreditaciones 

En cuanto al puerto de Palma de Mallorca, permanece cerrado desde las 15.00 h, apenas una hora después del atentado, según han informado fuentes de la Autoridad Portuaria de Baleares.

Hasta nuevo aviso, el tráfico marítimo y terrestre está restringido en la terminal de la capital balear, aunque la Guardia Civil ha permitido la salida de algunos barcos. La primera embarcación que ha salido desde Palma de Mallorca ha sido un crucero, que ha salido con una hora de retraso.

En el otro puerto principal de la isla, en el municipio de Alcudia (en el norte de la isla), los controles de la Benemérita son asimismo "estrictos", aunque también se ha autorizado la salida de un ferry.

El aeropuerto mallorquín es el tercero de España, sólo por detrás de los de Madrid-Barajas y El Prat de Barcelona tanto en número de operaciones (193.379 en el año 2008) como de pasajeros (casi 23 millones en el mismo año).