En el centro, los profesionales comprobaron que el niño padecía lesiones craneales por lo que fue derivado al Hospital Niño Jesús de Madrid, especialista en Pediatría. Según explicó, los médicos del hospital madrileño observaron que esas lesiones no eran "ni secuelas del enfriamiento que tenía el niño, ni producidas por caídas fortuitas sino que tenían que haber sido originadas por agentes externos, golpes que le habían dado al bebé".

En ese momento, se realizó el parte médico y se informó a la Policía Nacional de Madrid y de Cuenca. Así, se procedió el pasado martes, a la detención de la madre y ayer, a la detención del padre del bebé. Ambos han pasado ya a disposición judicial.

El bebé ha sido trasladado de nuevo al Hospital Virgen de la Luz de Cuenca, donde se encuentra en observación.

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