La cifra de muertos por la explosión en una mezquita de la ciudad de Zahedan, en el sureste de Irán, asciende a 30 personas, mientras otras 60 resultaron heridas, según el último balance publicado por la agencia de noticias semi-oficial ILNA.

La agencia precisó que la explosión fue provocada por un terrorista suicida, pero ningún grupo o persona ha reclamado la autoría del atentado.

Poco después de la explosión, las fuerzas de seguridad descubrieron y desactivaron una segunda bomba cerca de la mezquita, según la agencia semi-oficial FARS.

El gobernador provincial dijo a la televisión estatal que la explosión se produjo a las 19.45, cuando la mezquita estaba llena de gente.

El ataque coincide con una fiesta iraní

El atentado coincide con la jornada festiva en la que los iraníes conmemoran al primer imán chií, Ali Ebne-Abitaleb, a quien la mezquita atacada debe su nombre.

Zahedan, ciudad de mayoría suní, es la capital de la provincia de Sistan-Baluchestan, fronteriza con Pakistán y escenario de frecuentes enfrentamientos entre la Policía iraní y traficantes de drogas y milicianos.