La Escuela de Minas ha instalado en la calle Independencia una mesa para recoger firmas de alumnos y ciudadanos que rechazan el traslado al Campus de Mieres.

"Todos firman salvo los que son de Mieres o de alrededores que sí quieren que se la lleven", cuentan los alumnos. En dos días (el martes y el miércoles) recogieron 1.200 firmas.

Durante todo el día la mesa está en la calle y hoy ha ido a firmar el alcalde de Oviedo, quizá uno de los máximos defensores de que la escuela se quede en la capital.

Él estudió Minas y no quiere ver cómo se llevan su facultad de la ciudad. Hoy se ha emocionado al volver a las aulas. "En estos 22 años tengo que reconocer que en dos ocasiones se me saltaron las lágrimas y las dos aquí: una fue cuando asistí a la entrega de títulos y mi hijo Gabino recogió el suyo, y la otra hace un momento", ha reconocido el edil que defiende que el edificio "no está en ruinas".

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