El Ayuntamiento de Gijón niega que el ex arquitecto jefe cometiera un pelotazo

  • Según el concejal de Urbanismo, no recalificaron el suelo de la finca.
  • Sanjurjo negó que Ovidio Blanco se hubiera lucrado gracias a su posición.
  • En la aprobación del Plan, el arquitecto no estaba en el Ayuntamiento.
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El concejal de Urbanismo en el Ayuntamiento de Gijón, Pedro Sanjurjo, negó hoy "categóricamente" que exista cualquier irregularidad en el Plan General de Urbanismo o en el Plan parcial de Cabueñes. De esta forma, negó que el que fuera arquitecto jefe de Gijón, Ovidio Blanco, se hubiera lucrado con 600.000 euros al revender una finca que se había recalificado, tal y como publica hoy el diario El Mundo.

Sanjurjo, en una rueda de prensa ofrecida en el Ayuntamiento, dijo que no se produjo ninguna variación respecto al suelo en el que supuestamente el arquitecto tendría intereses. Además, también rechazó la idea de que Blanco se hubiese aprovechado de su posición para conseguir un lucro personal.

No obstante, a preguntas de los periodistas sobre la fecha en la que el Ayuntamiento de Gijón contrató al equipo de Luis Felipe Alonso Teixidor para redactar el documento de adaptación del Plan general, Sanjurjo manifestó que se hizo por decreto de alcaldía el 4 de noviembre de 2002, fecha en la que Ovidio Blanco aún ocupaba su cargo de arquitecto jefe.

El edil socialista explicó que actualmente, Blanco, no está en el cargo desde el 31 de diciembre de 2003. "Siendo arquitecto responsable de Urbanismo, no ha tenido ninguna relación directa ni indirecta con el Plan parcial de Cabueñes, que seguirá adelante con total normalidad", afirmó.

En este sentido Sanjurgo indicó que está previsto que la próxima comisión de urbanismo estudie las alegaciones presentadas al Plan para seguir con su tramitación con "total y absoluta normalidad".

El edil quiso dejar clara la "inequívoca transparencia" con la que actúa y actuó el Ayuntamiento de Gijón atendiendo a los intereses de los ciudadanos y nunca a intereses particulares. Por ello insistió en que mientras Blanco ocupó su cargo municipal "no hubo ninguna toma de decisión ni acuerdo respecto a la adaptación del Plan general de ordenación".

Así recordó que la aprobación inicial de la adaptación del PGOU tuvo lugar el 9 de febrero de 2004; su aprobación definitiva el 30 de diciembre de 2005 y la aprobación del texto refundido el 13 de abril de 2007.

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