Les piden 16 años y siete meses por agredirse con una pistola y una vara

  • La pelea se inició sin motivo aparente.
  • Uno de los acusados disparó en dos ocasiones.
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El Ministerio Fiscal ha solicitado una pena de 13 años y un mes de prisión por un lado y 3 años y seis meses por otro, para dos hombres que se enfrascaron en una pelea en un bar que motivó que uno de ellos le disparase a otro en la calle y éste respondiese golpeándole en la cabeza con una vara.

En su escrito de acusación, el fiscal ha afirmado que sobre las 23.00 horas del 9 de diciembre de 2007, el acusado J.R.G. se encontraba bebiendo en un bar de Bujalance en el momento en el que el otro procesado L.L.G., entró en el local para comprar tabaco.

En ese instante, J.R.G. comenzó a insultar sin motivo aparente a L·L.G., por lo que se inició una pelea entre ambos, aunque sin graves consecuencias ya que cada uno se fue por su lado del local.

J.R.G., que se encontraba en Bujalance eventualmente por motivos laborales, se dirigió a casa del abuelo de un amigo donde se hospedaba para coger una pistola semiautomática que guardaba en su macuto y que había traído desde Barcelona, donde la adquirió por unos 1.500 euros.

Con la pistola en su poder, J.R.G. salió a la calle para buscar a L.L.G., al que encontró en la puerta del local donde se originó la pelea subido en un a moto y portando una vara.

En ese momento, J.R.G., sacó la pistola y con ánimo de acabar con la vida de L.L.G., que se encontraba a unos 12 metros de distancia, le disparó hasta en dos ocasiones, una del as cuales le impactó en el costado izquierdo.

De inmediato el agresor huyó del lugar y se encontró por el camino a un vehículo, cuyo ocupante no tenía nada que ver con lo sucedido y amenazó con la pistola tras disparar al aire, por lo que el conductor asustado aceleró bruscamente y se fue del lugar.

En busca del agresor

Por su lado, L.L.G. pasados unos minutos se levantó del suelo y conduciendo su moto se fue en busca de su agresor, al que alcanzó a la altura de las cocheras del Ayuntamiento, donde le arrebató la pistola y le golpeó varias veces en la cabeza con la vara que llevaba en la mano.

Posteriormente, la Guardia Civil interceptó a L.L.G. al que le requisó la pistola, mientras que J.R.G. fue detenido en la casa del abuelo de su amigo donde permanecía escondido.

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