Justo antes de abandonar el viernes la Audiencia Nacional para ingresar en un hospital madrileño, donde fue ingresado por una fuerte subida de tensión, y que ya ha abandonado recuperado (según Cadena Ser), el juez Baltasar Garzón redactó una providencia que sugiere la implicación en el caso Gürtel de nuevos parlamentarios, nacionales o autonómicos, o miembros de gobiernos regionales y por la que el juez podría inhibirse de la causa.

En una providencia Garzón libra un oficio con carácter urgente al Servicio de Reprografía de la Audiencia Nacional para que pongan a su disposición tres copias de las actuaciones, al objeto de "resolver lo oportuno sobre la inhibición".

Las dos primeras copias irían a los Tribunales Superior de Justicia de Madrid y Valencia en el caso de que hubiera hallado indicios sobre actividades delictivas por parte de diputados autonómicos o miembros de los Gobiernos de estas dos regiones. La tercera de las copias es la que sugiere que los posibles futuros imputados deben ser investigados por el Tribunal Supremo (diputados, senadores y miembros del Gobierno central).

En la causa, en la que se encuentran imputadas 37 personas, Garzón investiga una presunta trama de corrupción y tráfico de influencias que habría ofrecido "dádivas y sobornos" a funcionarios y autoridades de administraciones del PP en las comunidades de Madrid y Valencia a cambio de favores políticos.

Posible querella del PP

El juez Garzón se encuentra en un momento delicado siendo protagonista constante de la actualidad informativa diaria después de su investigación sobre una presunta trama de corrupción involucrada al entorno del PP. De hecho, este partido ha anunciado este viernes que presentará el lunes una querella por prevarización contra el juez si no se inhibe de la causa, como le ha pedido la Fiscalía, y la remite a los tribunales correspondientes.