En unos años, los vecinos de los distritos y los municipios de la periferia de Madrid no tendrán necesidad de entrar con su coche al centro de la capital. Podrán dejarlo fácilmente a las afueras y coger el bus. El Ayuntamiento ha proyectado 11 líneas de autobús exprés que saldrán de los aparcamientos disuasorios que se habilitarán en el extrarradio de Madrid y llegarán hasta los intercambiadores o estaciones intermodales de la almendra central.

La fecha límite para instalar todas esas líneas es 2011, año en que acaba la actual legislatura municipal. De momento, ya hay un trazado en funcionamiento desde enero de 2008: la E1, que une plaza Elíptica con Embajadores y la estación de Atocha.

San Blas y Vicálvaro

A finales de 2009 estarán listas otras dos líneas más, presentadas este miércoles por el concejal de Seguridad y Movilidad, Pedro Calvo. La E5 saldrá del estadio de La Peineta (San Blas), y la E6, de Puerta de Arganda (Vicálvaro).

Ambas llegarán hasta la avenida de Felipe II (Salamanca), pasando por la prolongación de O'Donnell, donde se construirá una plataforma reservada para el autobús. Las obras, financiadas con 1,5 millones de euros del plan ZP, comenzarán en primavera. Los buses irán directos desde el inicio hasta el final del trayecto y sólo harán paradas de forma excepcional. Además, las frecuencias estarán en torno a los 7 minutos. Con ello, los usuarios se pueden ahorrar cerca de 5 minutos en cada viaje.

Red de buses en las afueras

El plan municipal de transporte para esta legislatura incluye 30 líneas de autobús que conectarán los 14 distritos de la periferia sin tener que pasar por el centro. Habrá nuevos intercambiadores en Conde de Casal, Chamartín y Legazpi, se remodelará el de avenida de América y se construirán áreas intermodales en Alsacia, Sierra de Guadalupe y plaza de Castilla. La EMT estudia enlazar las futuras instalaciones olímpicas con buses lanzadera.