Si nadie me compra el piso que quiero vender, ¿qué hago para sacar unos dineritos? Pues alquilarlo. Es el razonamiento que explica que el alquiler en la ciudad de Barcelona haya caído un 4% el pasado 2008, por primera vez en muchos años, según datos de idealista.com a partir de 2.340 ofertas de viviendas.

Si alquilar un piso en enero de 2008 salía por 14,2 euros el metro cuadrado, el precio se ha reducido ahora hasta los 13,7 euros. «La demanda ha subido, pero la oferta lo ha hecho mucho más», explica el director comercial del portal, Eduard Andreu.

«Muchos particulares son propietarios que no pueden vender porque no hay mercado. Las agencias están ampliando su cartera con más vivienda de alquiler. Y, además, los promotores de obra nueva, que antes sólo pensaban en vender, ahora también desvían parte de las construcciones al alquiler»,  comenta Andreu.

A todo esto se une, cómo no, la crisis y «la pérdida de poder adquisitivo» porque muchas empresas están anunciando que congelarán sueldos. Consecuencia: no se pueden pagar precios tan altos como antes. De hecho, según los últimos datos de Habitatge, el encarecimiento de los alquileres en la capital pasó del 12% en 2007 al 6% al primer semestre de 2008.

Por distritos, es Les Corts el que experimenta un descenso mayor (-7%), un poco mayor que el Eixample (-6%) u Horta-Guinardó (-5%). Gràcia se mantiene estable y Nou Barris (+3%) es el único que se encarece. Sant Andreu y Horta-Guinardó (11,5 1/m2) ofrecen los alquileres más económicos, frente a Ciutat Vella (15 1/m2).

El abaratamiento del alquiler en Barcelona no es único. En el área metropolitana los precios caen el doble (8,9%). Castelldefels es el más caro y Rubí, el más económico. En Madrid los precios bajaron un 1,6% en todo el 2008.