El comité de empresa de B:SM en pleno ha irrumpido en la comisión de Seguridad y Movilidad del Ayuntamiento de Barcelona para denunciar que esta empresa municipal presiona y amenaza con despidos a los trabajadores de la Grúa Municipal para que retiren más vehículos.

"Nos hacen seguir por detectives privados sin formación que dicen en sus informes que los vehículos están cometiendo infracciones. Ya hay trabajadores sancionados y amenazados de despido", ha explicado uno de los miembros del comité ya fuera de la sala dónde se celebraba la comisión.

También han señalado que "se les llama al despacho" si no retiran "media docena" de vehículos al día, y que de los 380 trabajadores de la grúa municipal "algunos han pedido la baja psicológica por la presión", tal y como publicó 20 minutos hace casi un año.

Si bien en aquella ocasión B:SM negó cualquier tipo de presión a los vigilantes, ahora ha reconocido que se han contratado detectives para seguir a trabajadores "concretos, que históricamente no cumplen con las ratios de productividad" y para controlar el absentismo laboral. En cualquier caso, ha rechazado que se imponga "una cuota" de retiradas a nadie, sino la "obligación de coger el primer vehículo que encuentren cometiendo una infracción viaria".

La actuación de las aproximadamente ochenta grúas municipales de Barcelona se centra en requerimientos específicos, a responder a las solicitudes de los ciudadanos o de la propia autoridad municipal y en actuaciones directas sobre vehículos mal aparcados o que entorpecen la circulación.