El Ministerio Fiscal ha solicitado 13 años y 4 meses de prisión para R.P.C., de 22 años, por obligar a su ex pareja a mantener relaciones sexuales tras amenazarla en reiteradas ocasiones con una pistola de fogueo.

En su calificación provisional, el fiscal ha afirmado que el 19 de noviembre de 2007 el acusado esperó a la víctima en la puerta del domicilio de ésta y la arrastró hasta su coche para trasladarla a las afueras de la localidad.

Al llegar el acusado, en un gran estado de agresividad, le recriminó que no estuviese con él y le dijo que si no era suya no era de nadie y que la iba a matar, apuntándola en todo momento con un revólver de fogueo.

En el transcurso del altercado, la víctima le dio un golpe al acusado para que soltara la pistola que cayó en el asiento de atrás, momento en el que R.P.C. la sujetó por los brazos y la agarró del pelo.

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Una semana después y, mientras el acusado se encontraba en un bar con la víctima en compañía de unos amigos, le pidió que se marchara con él a dar y una vuelta en el coche, a lo que ésta se negó, aunque finalmente tuvo que aceptar para evitar que se mostrara violento.

De esta manera, el acusado detuvo el turismo en un descampado y le colocó la pistola en la cabeza insultándola y diciéndole que la iba a matar, momento en el que le obligó a quitarse la ropa y a mantener relaciones sexuales con él, a lo que ésta accedió por miedo.

Posteriormente, el acusado acudió al domicilio de la víctima exigiendo que le abrieran la puerta y una vez dentro se dirigió hasta su dormitorio, donde le apuntó con la pistola diciéndole que tenía muchos hombres a su alrededor y que tenía que cambiar o le pegaría un tiro y luego se lo daría él.

Finalmente, durante los cinco meses que duró la relación entre ambos, el acusado estuvo persiguiendo a la víctima y le amenazaba con la pistola para evitar que lo dejase, mientras que le prohibía que se acercarse a otros hombres y la agredía físicamente en reiteradas ocasiones.

Como consecuencia de esta situación, la víctima padece un transtorno ansioso-depresivo con cambios cognitivos, precisando tratamiento psiquiátrico y psicológico. Por ello, el fiscal ha pedido 13 años y 4 meses de prisión para el acusado al considerarlo autor de un delito de agresión sexual, otro de amenazas, uno más de maltrato en el ámbito familiar y otro de violencia física y psíquica habitual.

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