Las líneas 905 empiezan a tener cada vez más un riguroso control sobre su funcionamiento gracias a la resolución que el pasado 10 de diciembre aprobó el Ministerio de Industria, Turismo y Comercio. En el texto, publicado en el Boletín Oficial del Estado (BOE), se determina que a los servicios prestados a través del prefijo 905 se les aplicará la regulación vigente que pesa sobre los teléfonos de tarificación adicional como los 803, 806, 807 y 907. El objetivo es claro: impedir los abusos y fraudes que han sufrido cientos de españoles, víctimas de la facturación masiva de llamadas falsas a teléfonos de concursos televisivos que usan estas líneas.

Ya desde este martes 13  de enero, los usuarios que lo deseen podrán solicitar a su operador telefónico el llamado 'derecho de desconexión' por el que podrán inhabilitar la posibilidad de marcar estos números. Una forma de control que puede evitar muchos sustos en el futuro.

Además, se determina que si el usuario ha solicitado previamente la desconexión de los 803, 806 u 807, el operador le desconectará también de los 905 de forma automática, salvo indicación por parte del abonado.

Por otro lado, las empresas que usen este tipo de líneas tienen la obligación de transmitir, al inicio de la comunicación, una locución previa informativa del precio por llamada del servicio incluyendo impuestos y la identidad del titular del número, necesaria en caso de reclamaciones. También se prohíbe que la duración de la llamada se prolongue demasiado.

Y desde marzo, los usuarios deberán recibir facturas telefónicas desglosadas para conocer cuánto paga por llamada y cuánto por el servicio.

En 2004, las reclamaciones sobre prefijos como el 803, 806 o 807 llegaron a representar el 46% del total del sector de las telecomunicaciones, denuncias que sufrieron un gran descenso con la resolución aprobada sobre estas líneas en 2005. Sobre los 905, las denuncias eran escasas (tan sólo un 3,6% del total de quejas) aunque iban en aumento debido al vacío legal que existía. Más destacables eran las quejas sobre facturaciones masivas de 905 ya que llegaban al 10% del total entre enero y septiembre de 2008.

Los concursos televisivos

Toda la regulación sobre los prefijos 905 se ha producido tras las denuncias de muchas asociaciones de consumidores en contra de varios concursos televisivos y emisoras de radio que usan este número especial con tarifas altas y no reguladas hasta ahora, en lugar de usar los que empiezan por 806, como señala la normativa. Y eso que el 905 nació para prestar un servicio de encuestas y 'televotos' mediante tratamiento de llamadas masivas.

Las denuncias han llegado desde todos los puntos de España y hay usuarios que han recibido una factura telefónica superior a los 1.000 euros sin haber abusado de estos números. Unos 500.000 telespectadores están enganchados a estos programas en España, según el Consejo del Audiovisual de Cataluña (CAC).