Sus compañeros le han recomendado que se abrigue mucho cuando esté en Washington. David Cantero se enfrenta hoy a un nuevo reto profesional: retransmitir ante millones de espectadores la investidura de Barack Obama como presidente de EE UU. "Este trabajo consiste en contar lo que sucede y esta es una gran ocasión para ejercerlo", dice el presentador del telediario fin de semana.

¿Qué se siente al retransmitir un acontecimiento como este?

Es un honor, claro, un nuevo reto profesional. Tengo la oportunidad de contárselo a unos cuantos millones de espectadores en los Telediarios. Es una noticia histórica, una de las de verdad y allí estaré para contarlo. En eso consiste este trabajo, en contar lo que sucede, y esta es una gran ocasión para ejercerlo.

¿Le han hecho alguna recomendación sus compañeros?

Sí, que me abrigue, jajaja, y que me ponga unas buenas botas. Soy tremendamente friolero, así que seguramente las pasaré canutas, las previsiones hablan de temperaturas bajísimas. Iré forrado debajo del traje. Veremos.

Si pudiera hacerle alguna pregunta a Obama, ¿qué le preguntaría?

¿Cómo piensa, señor Obama, afrontar y asumir las inmensas expectativas y esperanzas que gran parte de los habitantes de este planeta han depositado en usted? ¿Será capaz de soportar esa responsabilidad? ¿Será capaz de cumplir una parte al menos?

El cambio de George Bush a Barak Obama, ¿repercutirá en el resto del mundo?

Ya ha repercutido. Desde el mismo instante en que se supo que Barak Obama sería el nuevo presidente de los Estados Unidos algo, por pequeño que fuera, empezó a cambiar, ha cambiado. Veremos que hace Obama una vez en el poder. El mundo entero ha vivido tiempos muy grises bajo el mandato de George W. Bush, ahora, con la llegada de Obama, al menos cabe la posibilidad, la esperanza, de alcanzar un verdadero cambio...

Usted entró en TVE como auxiliar de cámara ¿dónde se siente más cómodo delante o detrás de ellas?

Antes, hace ya años, me sentía mucho más cómodo detrás, no podía siquiera imaginar que algún día llegaría a estar delante del objetivo en vez de mirando por el visor. Ahora me siento muy bien donde estoy... Sigo indagando, aprendiendo...

¿Cómo dio el salto a la presentación? ¿Fue duro?

Fue extraño y completamente casual. Buscaban un presentador para un nuevo informativo territorial en Andalucía, donde yo vivía y trabajaba por aquel entonces, se hicieron varios castings y no encontraban a nadie. Algunos amigos y compañeros me empujaron a presentarme, a hacer la prueba. La hice, gustó, y hasta ahora, de eso hace ya más de diez años.

Cómo lleva lo de trabajar los fines de semana cuando todo el mundo está de fiesta.

Yo lo llevo muy bien. Me adapto bien a eso de ir "a la contra". También muchas veces tengo que trabajar entre semana, así la cosa queda compensada, de vez en cuando puedo disfrutar de un fin de semana como todo el mundo.

Tengo muy buenos recuerdos de esos años, tanto profesionales como personales. Italia me apasiona, allí me encontraba en mi salsa, el trabajo era duro e intenso, apasionante. Conocer de cerca los entresijos del Vaticano, hacer un montón de viajes siguiendo a Juan Pablo II, fue una experiencia muy interesante. Con Ratzinger coincidí en alguno de esos viajes, siempre nos facilitó las cosas para poder realizar un buen trabajo.

¿Qué es lo peor que le ha pasado en un directo?

Quedarme sin voz, sólo me ha pasado una vez, pero es muy embarazoso y desagradable.

¿Cuál es la noticia que más le ha impactado durante su etapa en informativos?

Han sido tantas que es casi imposible seleccionar una. Me impactó mucho la del accidente de Spanair en Barajas, poco antes de entrar en el plató me enteré de que me había afectado personalmente. Fue duro, me costó mucho centrarme, encontrar las palabras, mantener la mirada...

¿Cuál le ha parecido la noticia más relevante de 2008?

Ha sido un año muy intenso en información. Pero creo que la victoria de Barak Obama en las elecciones estadounidenses es una noticia histórica donde las haya. También la brutal escalada de violencia en Oriente Próximo que nos ha sorprendido en los últimos días del año.

Tengo la sensación de que, a pesar de la crisis, será un buen año. En lo personal no me gusta demasiado hacer planes, pero en abril saldrá mi próxima novela y eso seguramente será algo bueno.

En lo profesional hemos terminado 2008 como líderes absolutos en informativos, y estoy seguro de que en 2009 seguiremos creciendo y haciendo los mejores Telediarios. Durante todo el año, mes tras mes, hemos sido la primera opción de los espectadores para informarse. Ese reconocimiento nos proporciona una gran satisfacción.

¿Cómo se lleva con las audiencias, le quitan el sueño, le preocupan, le resbalan...?

No me quitan el sueño ni me resbalan. Son una medida de la aceptación del público, nada más. Son el reconocimiento a un trabajo hecho con rigor, pluralidad, seriedad y humildad. Pero tenemos que hacerlo igual de bien sean cual sean las audiencias, en los informativos de TVE no estamos por conseguir audiencia a cualquier precio.

¿Cómo se ve dentro de 10 años?

No lo sé... no se verme ni la semana que viene... (risas). Espero que bien de salud, trabajando en esto de la información que me encanta y escribiendo más novelas, lo que es mi gran pasión...

¿Cómo lleva las críticas?

Bien, la crítica es siempre necesaria, nos hace crecer y mejorar, darnos cuenta muchas veces de lo que hacemos mal.

¿No cree que en televisión prima demasiado el morbo?

Créame que apenas veo la tele, salvo algunos informativos y dibujos animados con mis hijos, o alguna peli de vez en cuando. Pero sí, la verdad es que muchos programas basan su éxito y su audiencia en alimentar todo tipo de bajezas humanas. No me interesa nada de eso. La televisión es un invento prodigoso que en muchos casos ha sido pervertido... La tele es un hada mancillada... dije alguna vez, y sigo pensando lo mismo...

¿Se puede ser objetivo a la hora de informar?

Se debe intentar siempre, buscar ser lo más objetivo posible, ser neutrales, equitativos, serios, rigurosos. La objetividad absoluta es una utopía, pero hay que estar lo más cerca posible de ella a la hora de contar lo que sucede...

En una entrevista usted comentaba que escribir y pintar le mantenía equilibrado. ¿Aun sigue pintando? ¿Qué tipo de cuadros pinta?

Claro, pintar y escribir son necesidades casi vitales para mí. Dar rienda suelta a mi creatividad me aporta equilibrio, comprensión, serenidad, placer... No puedo explicar en pocas palabras lo que pinto, sería mejor que usted lo viera... Tal vez un día me decida a exponer algunas de mis obras...

Algunos compañeros de profesión que presentaban informativos han pasado a hacer magacines ¿usted también lo haría?

No, al menos no eso que actualmente se entiende por magacines. No me veo fuera del formato de la información. Para mi estar delante de las cámaras está absolutamente ligado a la seriedad, el rigor, la cautela y la disciplina de la información. Me siento muy cómodo presentando Telediarios. Esto no es simplemente hacer un programa de televisión, es estar cerca de la actualidad para contar lo que sucede. Es ser periodista y poder contarlo delante de las cámaras...

BIO: Nació en Madrid el 1 de marzo de 1961. Comenzó en TVE como auxiliar de cámara y estuvo durante varios años trabajando como corresponsal en Roma. Desde 2004 conduce los telediarios de fin de semana en La 1 de TVE.