La actriz estadounidense Lindsay Lohan se ha despedido de 2008 relajada y playera, luciendo un sencillo bikini negro en Miami, según publica el diario británico Daily Mail.

Lohan, de 22 años, pasó el día 31 de diciembre de esta guisa junto a un grupo de sus más íntimos amigos, pero sin la compañía de su novia, la DJ Samantha Ronson, quien según fuentes cercanas consultadas por el diario se encontraba en Nueva York, muy incómoda por la presencia en la zona de Calum Best, una de las ex parejas de Lohan.

"Lindsay se sintió fatal cuando descubrió que Calum estaba allí, y evitó en todo momento hablar con él. Samantha tiene muchos celos de sus antiguos amantes masculinos, y Lindsay no quería incomodarla", explica una persona cercana a la pareja.

De hecho, son conocidas las continuas discusiones que ambas mantienen debido a las dudas que Lohan tiene sobre su condición sexual: un problema que les ha llevado a acudir a terapia.

Sin embargo, pese a los contratiempos la pareja volvió a reunirse pocas horas más tarde en Nueva York, a donde voló la intérprete para entrar en 2009 en compañía de su novia.