La otrora Spice Girl Geri Halliwell sorprendió a propios y extraños en una entrega de premios infantiles celebrada esta semana a la que acudió con un rojo vestido translúcido que dejaba ver sus nalgas desprovistas de ropa interior.

Según informa el blog Egotastic, aunque nadie se percató de ello al verla caminar de frente, al girarse para posar en la alfombra roja todo el mundo se sorprendió por la forma en la que la chica picante presumía de sus bien llevados 36 años.

Ante el revuelo que causó entre los fotógrafos convocados para cubrir la entrega de los premios BAFTA infantiles, Halliwell se apresuró a entrar en el recinto, cediendo los focos a otras de las invitadas, como Sienna Miller o Keira Knightly, que acudieron juntas y notablemente más recatadas.