El derbi entre el Atlético y el Real Madrid, saldado con 1-2 para el equipo visitante, está deparando una jugosa resaca.
Y no sólo por las polémicas palabras de Bernd Schuster, técnico madridista, quien aseveró que sus jugadores habrían ganado 1-5 de no ser por el árbitro.
El palco del Calderón, tal y como informa Marca, también vivió un controvertido capítulo. A Pepiño Blanco, vicesecretario general del PSOE, le dedicaron un comentario bromista sobre su camisa, a rayas rojas y blancas.
Blanco, ni corto ni perezoso, respondió con contundencia: "Es que siempre he sido del Atlético, tengo un asco al Madrid que no lo puedo ni ver".
La indignación entre los representantes de la entidad madridista fue considerable.
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