Abrir un comercio, dos meses; un bar, hasta seis

Obtener licencia de apertura cuesta 60 días, como mínimo, pero los bares, peluquerías y talleres esperan mucho más. Hay 2.053 permisos estancados
Conseguir la licencia de apertura para un negocio en Zaragoza cuesta, en el mejor de los casos, dos meses. Si se trata de una peluquería, un garaje, una gasolinera y requiere informes del Gobierno de Aragón, los trámites se demoran hasta 180 ó 200 días (el plazo legal es de 120 días). La situación se complica, aún más, si se pretende poner en marcha un bar, ya que a los dos meses para lograr la licencia de apertura hay que añadir 150 días para obtener la de actividad.

Éste es el tiempo medio que esperaron los emprendedores zaragozanos que solicitaron los permisos en 2004. A éstos hay que añadir 2.053 licencias de apertura (2.334 menos que en 2001) que siguen estancadas en Urbanismo. Por eso es frecuente que, aunque la ley no lo permita, los negocios inicien la actividad antes de obtener la licencia municipal.

Madrid quiere atajar este problema. Para poner en marcha un negocio, antes eran necesarias tres licencias y 1.000 días. El Consistorio ha decidido unirlas y reducir la espera a 30 días.

Balance de gestión

La Gerencia de Urbanismo de Zaragoza ha conseguido reducir la carga de expedientes un 17% respecto a 2003. Ahora quedan 12.311 permisos por tramitar, que se rebajarán a 8.000 en 2006, si se cumplen las previsiones del responsable de Urbanismo, Antonio Gaspar.

Esta área municipal tramitó el año pasado 21.548 expedientes, de los que 300 eran licencias de construcción y rehabilitación de 5.495 viviendas (864 VPO).

Urbanismo atendió a 75.600 ciudadanos y 41.981 consultas en la web (610 pedían información sobre solares y 1.202 acerca de la inspección técnica de solares).

Ágil respuesta en obras menores

Conseguir permiso para reformar un baño cuesta 20 minutos. El 42% de las solicitudes de obras menores se autorizan en el acto y, en el peor de los casos, se demoran 14 días. Emprender reformas en la vivienda sin la correspondiente autorización municipal se paga caro. El servicio de Disciplina e Inspección Urbanística, que se ha reforzado, sanciona a quienes cierran las terrazas, instalan aires acondicionados sin permiso o antenas parabólicas. En 2004, emitieron sanciones por valor de 117.0001.

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